Aunque la mayoría de los síntomas de las infecciones respiratorias leves suele desaparecer por sí sola a los pocos días, hay algunos que podrían alargarse mucho más tiempo.
Las infecciones respiratorias, gastrointestinales o urinarias son algo más o menos común en la población. Sin embargo, es de vital importancia estar atentos a su evolución para que no derive en una sepsis, una complicación mucho más grave que puede llegar a provocar la muerte.
Muchas personas, después de la infección inicial, sufren la pérdida del olfato y el gusto. Este y otros síntomas pueden ser persistentes en pacientes que han sufrido coronavirus, con una recuperación que muchas veces se prolonga durante meses.
Hay problemas de salud en los que la edad no importa, sino las causas que los desencadenan. Porque aunque es verdad que algunas aparecen con mayor frecuencia, por ejemplo, a partir de la menopausia, no siempre se trata de dolencias que llegan con el paso del tiempo.
Esta infección puede provocar una peligrosa encefalitis y tiene una letalidad que oscila entre el 40 y el 75%. La OMS considera que tiene potencial epidémico.
Es posible contraer infecciones a través del sexo oral que normalmente no se consideran de transmisión sexual, especialmente ciertas enfermedades gastrointestinales.
No son pocas las personas que se quitan todos los pelos de la nariz para evitar que resulten molestos y antiestéticos. Pocos conocen los riesgos que supone para la salud esta práctica y cómo algo tan sencillo como depilar estos pelos puede tener consecuencias para ellos.
Siempre se ha dicho que bañarte en la playa cura, pero, ¿cómo afecta realmente el agua salada a nuestra piel dañada? Exploramos los efectos de esta relación en detalle.
Los adultos mayores de 65 años son más susceptibles de padecer procesos infecciosos con más frecuencia y de mayor gravedad, por lo que se hace necesario un plan de prevención específico.
Los virus, bacterias, hongos y toxinas no se ven, pero pueden estar presentes en los alimentos que consumimos. Es fundamental tomar medidas básicas de prevención para minimizar los riesgos de contagio y evitar enfermedades como la listeriosis o la salmonelosis.