El estado de Alabama tiene previsto ejecutar a Kenneth Eugene Smith, condenado a muerte por su participación en el asesinato por encargo de la esposa de un predicador en 1988. El gas nitrógeno nunca se ha empleado como método de asfixia para aplicar la pena capital.
Aunque el nitrógeno es el cuarto elemento más abundante en el cuerpo después del oxígeno, el carbono y el hidrógeno, una sobreexposición en nuestro organismo puede llevar a una consecuencia dolorosa y letal. Por ello se ha desatado la polémica en Alabama, que ha dado luz verde a ejecutar a un preso usando este gas.

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