Cuando Manuela Carmena llegó a la Plaza de Castilla en el ochenta y tantos, a sus juzgados se les conocía como 'los juzgados de Plaza Astilla'. Nada que ver con el bricolaje, la astilla era esa pequeña corrupción, de dos a cinco mil pesetas, con la que se sobornaba al funcionario de turno para que adelantara o retrasara un pleito. Escandalizada, la exjueza procesó a cinco de sus diez empleados, y el resto pidió el traslado. Seis novatos, recién salidos de la carrera, los reemplazaron. Uno de ellos era Luis Cueto (Madrid, 1961).

Luis Cueto: "Somos la parte más sensata del gobierno de Carmena"

Todavía imberbe, hizo sus primeros pinitos en la comisión de embargos. Una experiencia que, sin sombra de duda, condicionaría su futuro. Si ante un impago el juez ordenaba la incautación de una nevera, un televisor o un mueble, el joven cruzaba el Misisipi, como bautizaron al Manzanares, para ejecutar el procedimiento. En esos lares conoció a muchos padres de barrios humildes que habían avalado a sus hijos y no podían soportar la deuda. Más de tres décadas después, recuerda sus lágrimas cuando narra esta historia en uno de los vídeos que Profesionales-Recupera Madrid le grabó de cara a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo. 

Tras una vida dedicada a lo público, Cueto aspira como último servicio a lograr el sueño de su tía Carmena (está casado con la sobrina de la exregidora): concurrir a las elecciones con un grupo de profesionales, ajenos a las lógicas y las ataduras de los partidos políticos, que emula la estructura y la razón de ser de las agrupaciones de electores. Esa era la idea en origen, pero un problema a la hora de tramitar las firmas que exige la Junta Electoral, le obligó a montar un partido "carcasa", que, en todo caso, desaparecerá al día siguiente a las urnas. Es más, las 8.000 rúbricas también las han conseguido. 

Ahora, para entrar en el Ayuntamiento de Madrid, necesita 80.000 votos, que suponen un 5% de representación mínima. Su lema es: "Cada voto es un político menos y un profesional más". Como ya hizo la exalcaldesa al  disolver la mesa de partidos y gestionar la ciudad entre vocales vecinos, el grupo de asesoramiento del grupo, sus concejales y 26 mil funcionarios, el edil del Grupo Mixto encabeza una suerte de candidatura de tecnócratas con especialistas en cada una de las áreas. Un policía municipal para Seguridad, una trabajadora del hogar en Derechos Sociales o un triatleta a cargo de Deportes que si no logra su objetivo, seguirá con sus carrera laboral, sin caer en la tentación de 'hacer carrera' de la política.

Una profesora, un triatleta, una médica... ¿Cómo es la primera agrupación de electores que se presenta a las elecciones en Madrid?

Cueto dio el salto a la política en 2019, cuando engrosó las listas para la reelección de Carmena, bajo el ala de Más Madrid. Antes fue el Coordinador General de la Alcaldía en el mandato de Ahora Madrid, labor que le granjeó el seudónimo de "alcalde en la sombra". No en balde, fue el responsable de las relaciones con el sector empresarial, así como con otras Administraciones Públicas nacionales o extranjeras. Representó al Consistorio en Ifema, Club de Campo o Madrid Destino y simbolizó la figura de primer edil en multitud de instituciones, como el patronato de la Casa Árabe de América o el del Teatro Real. Por eso, Cueto nunca ha ocultado que, a diferencia de otros representantes de izquierdas, él se siente orgulloso de su buena sintonía con Florentino Pérez o Miguel Ángel Gil Marín. 

Tras la derrota de Carmena en la investidura de 2019, la portavoz del grupo, Rita Mestre, cogió las riendas del partido. Y dos años más tarde, en 2021, por desavenencias con su forma de liderarlo, cuatro concejales, entre ellos Cueto, abandonaron su disciplina para formar parte del Grupo Mixto. Los conocidos como los 'carmenistas'.  De ese tiempo a esta parte, han sido claves ofreciendo sus votos para la aprobación de los Presupuestos de Almeida en 2021, la Ordenanza de Movilidad o la de Terrazas. Acuerdos que desde Más Madrid siempre han visto con muy malos ojos. Al contrario, los díscolos se congratulan de ser "capaces de pactar con la trinchera de enfrente" y lograr así que, por ejemplo, Almudena Grandes fuera nombrada hija predilecta de Madrid.

Un unicornio de la política 

Licenciado en derecho, Cueto es un alto funcionario del Estado, técnico de la Administración General y adscrito al Ministerio de Asuntos Económicos. Vamos, conoce las instituciones como la palma de su mano. En los mentideros del Palacio de la Cibeles, nadie pone en duda su buena cabeza, su carácter lenguaraz y la perspicacia de casi todas sus intervenciones. Aunque en alguna ocasión esto le haya llevado a recibir una buena ducha de insultos, como cuando el líder de Vox, Javier Ortega Smith, le llamo "payaso", "comunista" e "inútil" por que el carmenista le dijo antes que le "importaba un bledo" una determinada votación, siendo la planta del bledo "de tallo rastrero". Muy de Cueto.

Redes

Su precampaña electoral tampoco ha estado exenta de polémica. Además de sortear entradas al festival Mad Cool o camisetas del Atlético de Madrid entre quienes firmaran su candidatura, los de Recupera buscaron a su concejal de Hacienda por LinkedIn, una fórmula muy poco habitual en política. De eso se empeñan en alejarse, como así lo muestra uno de sus últimos vídeos de TikTok, donde el propio Cueto aparece enterrando en una tumba a los pies del Ayuntamiento las papeletas del resto de formaciones. De fondo, suena el Tong, tong, tong del sepulturero. Pero nada define mejor al sobrino de Carmena que la foto que colgó para celebrar la recogida de las ocho mil firmas, disfrutando, puro en mano, de la brisa del mar. Si no logra conseguir el sueño de su tía política, cumplirá el otro de volverse a su casa de Cantabria y disfrutar de su 'Shangri-La norteño' para iniciar una tercera parte de su vida como jubilado activo. 

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