Los precios no paran de subir. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) la tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) se situó en un 9,8% en marzo de 2022, el dato más alto desde mayo de 1985.

Asimismo, en cuanto al coste de los alimentos, se ha observado un incremento de un punto hasta situarse en un 6,8%. Esto se debe especialmente al aumento del precio del pescado, marisco, legumbres, hortalizas, leche, queso, huevos y carne.

Ante esta situación… ¿Qué es lo que puede hacer el consumidor? El aumento de los precios no es algo que un usuario medio pueda cambiar, pero con pequeñas modificaciones en los hábitos de compra se puede conseguir cierto ahorro.

1) Hábitos de compra

Lo primero que una persona debería hacer es una reflexión de cuáles son sus hábitos de consumo, es decir, identificar cuál es su estilo de compra: si apuesta por lo más barato, si tiende a comprar productos frescos, etc.

2) El lugar más barato

Una vez el usuario sepa cuáles son sus hábitos deberá buscar el lugar más barato para adquirir los productos. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recoge un estudio de los supermercados con los mejores precios de España y los divide en tres categorías: cesta económica (con los productos más baratos del establecimiento), cesta de marca (con los alimentos de las marcas líderes) y cesta de productos frescos. En función del grupo escogido será más barato un supermercado u otro.

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De esta manera, un usuario puede saber en qué supermercado le puede salir más barato comprar en función de los alimentos que suele consumir habitualmente: si es de los que prefiere coger los elementos más baratos posibles, si adquiere muchos productos frescos o confía en unas marcas determinadas.

3) Productos frescos baratos a última hora de la tarde

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De hecho, si la persona suele comprar bastantes productos frescos una forma de encontrarlos más baratos es a última hora de la tarde. Esto se debe a que los supermercados suelen lanzar ofertas en ese momento para evitar tirar lo que les ha sobrado.

4) La proximidad

La proximidad es otro elemento a tener en cuenta. "Si sabemos que un comercio en concreto es más barato, pero tardamos hasta media hora en llegar al mismo, al final no nos saldrá rentable, puesto que el precio de la gasolina también hay que tenerlo en cuenta" subraya Antonio Gallardo, experto de Banqmi, comparador financiero de iAhorro. Por lo tanto, lo que tiene que encontrar una persona es el supermercado más barato de su zona.

5) Elegir el momento de hacer la compra

Ir a la compra no puede decidirse en el momento, sino que hay que planificarlo bien, de la misma forma que una persona se organiza para ir al cine o pasear. "Improvisar puede provocar que acabemos adquiriendo cosas que realmente no necesitemos", asegura el experto de Banqmi.

Es por ello que lo aconsejable es organizar lo que se piensa comer durante la semana o el mes (dependiendo de si el usuario hace compra semanal o mensual) y, en función de ello, hacer una lista de la compra. Cuando se tenga toda la información se reserva un hueco en la agenda para poder ir a realizar la tarea con calma.

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6) Llevar bolsas desde casa

De esta manera la persona tendrá claro que tiene que comprar y, además, podrá acordarse de llevar bolsas para traer los productos. "Aunque parezca una tontería, si cada vez que realizamos la compra también tenemos que adquirir bolsas nos estamos gastando un dinero de más que podía haberse quedado en nuestro bolsillo", explica Gallardo.

7) No hacer la compra con hambre

EL CORTE INGLÉS

Asimismo, en el momento de ir al supermercado el consumidor no debe tener hambre, debido a que eso provocará que sea más impulsivo a la hora de adquirir los productos. Si el usuario tiene hambre comprará cosas que, si hubiera ido en otro estado, no las habría metido en la cesta.

8) Controlar las cantidas y las ofertas gancho

EUROPA PRESS

Cuidado con las cantidades. Los establecimientos tienen la tendencia de poner ofertas como “1 kilo a un euro” o “compra dos y llévate tres”, pero la pregunta es… ¿Realmente es necesario comprar tanta cantidad? Si la unidad familiar está compuesta por dos personas, por ejemplo, es mejor adquirir envases individuales o la verdura por piezas, puesto que no se utiliza tanta comida.

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9) Compras a granel

En el caso de los alimentos que se venden en bolsas grandes, como pueden ser las legumbres o la pasta, se puede buscar una tienda cercana en la que se puedan adquirir estos elementos a granel para comprar únicamente la cantidad que se necesita. El truco está en comprar lo justo.

10) Una buena planificación general ahorra dinero

En definitiva, una buena planificación es clave para que el consumir tan solo compre lo que necesita. Esto le ayudará a ahorrar, algo imprescindible en estos tiempos con los precios desorbitados.