¿Vuelven las mascarillas? El pico de contagios de infecciones respiratorias en España ha obligado a dar un paso atrás. Apenas medio año después de que el Gobierno aprobase el fin de las mascarillas obligatorias en centros sanitarios, farmacias y residencias, el Ministerio de Sanidad pedirá a las comunidades autónomas volver a implantar esa obligación para frenar una incidencia que roza ya los 1.0000 casos por cada 100.000 habitantes. Lo hará este lunes, en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) convocado de forma extraordinaria por la titular de Sanidad, Mónica García, para "unificar criterios" ante un aumento de casos que, según alertó el viernes, "seguirá intensificándose en los próximos días".
La propuesta de García pretende frenar el preocupante repunte de contagios de gripe y evitar la saturación de los hospitales y centros sanitarios, que, por ahora, mantienen un nivel de hospitalizaciones relativamente bajo: 30 por cada 100.000 habitantes. Según explica su departamento, la intención es implantar la medida de forma transitoria y mientras dure el pico epidémico de la gripe A y otros virus respiratorios, que se prevé alcance su máximo en la tercera semana de enero.
"Es crucial desde este ministerio recordar e insistir en la importancia de llevar siempre una mascarilla a mano en estas fechas. Esta recomendación es especialmente relevante en situaciones de aglomeraciones en interiores y muy especialmente en los hospitales, centros de salud y residencias de mayores", aseveró el viernes la ministra, asumiendo que la población ya cuenta con una "amplia experiencia" en medidas de higiene tras la crisis sanitaria. "Apelamos al sentido común, ese mismo espíritu resiliente demostrado durante la pandemia y cómo no, agradecemos todos los esfuerzos por cuidarnos mutuamente", añadió.
Obligatoria ya en cuatro comunidades
La decisión va, además, en línea con las decisiones adoptadas la semana pasada por algunos gobiernos autonómicos, como el de la Comunidad Valenciana, que fue el primero en dar el paso de recuperar la obligatoriedad de la mascarilla en centro sanitarios y sociosanitarios. También Cataluña optó por esta medida y avanzó que añadiría un par de peticiones más para el Consejo Interterritorial del lunes: que el Estado vuelva permitir las bajas automáticas y recuperar las declaraciones responsables de ausencias que funcionaron durante el estado de alarma. Murcia y Aragón se sumaron a la medida poco después, aunque el Aragón ha optado por reducir esa obligatoriedad al personal sanitario y extender la recomendación al conjunto de la ciudadanía en sitios cerrados.
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En todo caso, es competencia de las comunidades decidir si quieren imponer o no el uso obligatorio de las mascarillas en determinados espacios. Si hasta el mes de julio sí que era una medida imperativa, fue porque el Gobierno la impuso vía decreto. "Ellas son las que están en primera línea y son las que conocen mejor sus necesidades", subrayó García el viernes en un vídeo difundido en redes sociales. El papel de su ministerio ahí, sostuvo, debe ser el de "brindar el máximo apoyo y coordinar", siempre respetando las competencias.
Hasta ahora, el resto de autonomías no se ha pronunciado al respecto o simplemente han recomendado su uso a los ciudadanos. La Rioja, Asturias, Galicia, Baleares, Comunidad de Madrid, Castilla y León, País Vasco o Navarra no son partidarias de la obligatoriedad y se decantan por recomendar su utilización. Navarra, por su parte, defiende que recuperar esta medida supondría un ajuste normativo que "habría que estudiar a fondo".
Volver a hacer obligatoria la mascarilla en centros sanitarios era una medida que venían pidiendo varias asociaciones ante el repunte de contagios. La gripe, por ejemplo, circula ya a niveles epidémicos, tras aumentar la incidencia un 75% en apenas una semana y dispararse un 60% los ingresos en hospitales. Ante esta situación, tanto las sociedades de Medicina de Familia, como la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) y la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), sugirieron, incluso, ir más allá y extender esta medida al transporte público y espacios sin adecuada ventilación, dada la efectividad demostrada durante la pandemia.
También la Organización Médica Colegial (OMC) mostró su "apoyo" a las comunidades que están implantando el uso de mascarillas en centros de salud y hospitales. El viernes recordaron en un comunicado, que el uso de mascarillas puede ser "conveniente, de forma voluntaria", en determinados lugares muy concurridos; e hicieron un llamamiento a la responsabilidad ciudadana "no saturar" los centros de salud de Atención Primaria. "Es importante trasladar un mensaje de responsabilidad en lo que respecta al buen uso de estos centros asistenciales, evitando acudir para procesos banales", declaró la organización colegial.
A 4 de enero, y según datos del Instituto de Salud Carlos III —adscrito al Ministerio de Sanidad—, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Asturias son los territorios con mayores tasas de infecciones respiratorias agudas, con incidencias de 1.709 por 100.000 habitantes, 1.501 y 1.318, respectivamente. Le siguen Canarias (1.285), Melilla (1.271), Castilla y eón (1.209) y Aragón (1.195).
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