El PSOE decide ir con todo en su primer gran reto en la nueva legislatura. El miércoles se votarán tres decretos en el Congreso de los Diputados -entre los que se incluyen las reformas para poder recibir 10.000 millones de euros de fondos europeos o las medidas para paliar la crisis derivada de las guerras de Ucrania y Palestina- y, pese a que actualmente no cuenta con los votos para aprobarlos, no los retirarán. Los socialistas seguirán negociando hasta entonces con Junts, que sigue instalado en el 'no', y con el PP, que se abre a abstenerse en caso de que la coalición acepte alguna de sus medidas económicas, entre lo que se incluye una bajada de impuestos o la deflactación del IRFP.
"Descartamos retirar los decretos, los llevaremos a votación", ha confirmado Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE. En una rueda de prensa este lunes en Ferraz, sede del partido, ha querido trasladar la presión a los grupos que continúan con su negativa a apoyar al Gobierno. "Quienes no quieran apoyarlos tendrán que explicarlo", ha apuntado Cerdán, que ha asegurado que no se trata "de salvar a [Pedro] Sánchez, sino a la ciudadanía" porque se votarán medidas anticrisis "para proteger a quien más lo necesita, medidas para desempleados, subida de las pensiones un 3,8% y lo necesario para cumplir con Bruselas y recibir el cuarto desembolso de fondos europeos, de 10.000 millones de euros".
Las presiones de los socialistas parecen no funcionar para convencer a Junts, que este lunes ha vuelto a insistir en su 'no'. El motivo es, según Josep Rius, portavoz de los de Carles Puigdemont, expresident de la Generalitat ahora fugado de la Justicia, los reales decretos del Gobierno "agravan la infrafinanciación que ya sufre Catalunya, implican recortes de competencias de la Generalitat y ponen en peligro la aplicación de la ley de amnistía". Esto último lo ha negado Cerdán, encargado de llevar a cabo las conversaciones con los junteros, que ha afirmado que las conversaciones seguirán hasta el mismo miércoles y ha anunciado que Junts tiene "asumido" que la cuestión prejudicial se hará porque es Derecho de la Unión Europea. "Es cumplir con la legislación europea… Lo saben y están de acuerdo", ha apuntado.
Lo que sí ha rechazado Cerdán es avanzar qué "elementos" -según los ha definido María Jesús Montero, vicepresidenta primera y ministra de Hacienda- están hablando con los catalanes o con el PP, cuya vía comunicativa continúa abierta. Este domingo se produjo una llamada y este lunes ha habido otra más entre Félix Bolaños, ministro de la Presidencia y de Justicia, y Cuca Gamarra, secretaria general de los populares. "Seguiremos hablando tanto con Junts como con el PP", ha afirmado el secretario de Organización, que se ha gratificado de que ERC ya haya confirmado su voto afirmativo.
Cabe recordar que las peticiones del PP pasan por deflactar la tarifa IRPF a rentas menores de 40.000 euros, bajar el IVA a la carne, pescado y conservas y reconsiderar la subida del IVA de luz y gas sobre todo a rentas bajas. Montero, también vicesecretaria general del partido, había rechazado horas antes en una entrevista en TVE que el Gobierno fuera aceptar las "bajadas de impuestos" que son "políticas fracasadas", pero ahora los socialistas podrían estudiarlo.
Más tranquilos se han mostrado en lo relativo a Podemos. Ya fuera del grupo parlamentario de Sumar, los morados piden limitar el precio de los productos básicos de la cesta de la compra y fijar en el 2% el tope a la subida anual del alquiler, que este año está en el 3%. "Podemos siempre ha trabajado a favor de los ciudadanos, confiamos en que lo seguirán haciendo", han apuntado fuentes socialistas.
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