Dice el doctor en Biología Fernando Martínez Flores, —conocido como DrBioblogo en las redes sociales—, en uno de sus hilos más populares, que "muchos nos sentimos fascinados por los animales con colores atípicamente blancos o negros".

Los animales melánicos, cuando tienen exceso de melanina y pigmentación, los leucísticos, que presentan ausencia de pigmento, y los albinos, falta total de pigmentación que incluye piel y ojos, provocan gran interés. Probablemente, el representante más popular de animales melánicos sea la pantera, de la que aún hoy en día muchas personas creen que se trata de una especie diferente de felino salvaje. En realidad, las panteras son leopardos, cuyo hábitat es África y Asia, y jaguares, de distribución americana, que muestran esta fascinante aberración o mutación cromosómica llamada melanismo.

Tanto el melanismo, como el leucismo y el albinismo, pueden presentarse en gran número de animales y en todos los grupos taxonómicos: mamíferos terrestres y marinos, reptiles, aves, anfibios, insectos, peces y hasta en crustáceos.

Hace escasas semanas, de la mano de los biólogos evolutivos Germán Orizaola y de Pablo Burraco, conocíamos un estudio sobre las ranas negras, o melánicas, de la zona con radiación de Chernóbil, y a las que la pigmentación oscura parece haber ayudado a reducir el daño de la radiación.

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Hay ejemplares con estas aberraciones —no, no les estamos insultando, 4ª acepción de la RAE—, que resultan tan asombrosos, llamativos y excepcionales que no cuesta entender por qué en culturas pretéritas con fuerte carga mística, se les consideraba espíritus de los bosques, mares o ríos. Estos animales han sido, y son, protagonistas de numerosos mitos y leyendas en el folklore.

Culturalmente, es innegable que abunda más la simbología de pureza y sabiduría aplicadas a animales blancos, como en la leyenda artúrica, donde un ciervo blanco representa la búsqueda espiritual. También es el animal elegido en la reciente secuela La casa del dragón como emisario de un mensaje sobrenatural al personaje de Rhaenyra Targaryen. Para los hindúes, un elefante blanco es un símbolo sagrado. Entre los miembros de la nación sioux norteamericana, el nacimiento de un búfalo blanco cuenta con su propia profecía. 

En contraposición, los gatos negros, afectados de melanismo, a menudo se han asociado a la magia negra o a la mala suerte, sin embargo en Egipto o en Japón, los gatos negros tienen connotaciones de protección y buena suerte. En general, para las culturas de todas las poblaciones indígenas del mundo, la aparición de animales de color inusual son embajadores venerados que comunican señales o presagios y cuentan con su propia leyenda.

Este impresionante alce blanco leucístico grabado en Suecia por Hans Nilsson en 2017, y al que rastreó durante tres años hasta poder grabarlo, suele reaparecer habitualmente en las redes sociales y nunca deja indiferente.

En contraste, también podemos ver este increíble gamo macho melánico en los bosques de Polonia y grabado por Jakub Wencek. A menudo, estos rarísimos ejemplares se convierten en demandados trofeos de caza. 

Los servales son otra especie felina que en ocasiones muestran un melanismo destacado. En este caso, un ejemplar en el Parque Nacional Tsavo, en Kenia.

Este aligátor, bautizado como Snowball, y que vivía en un zoológico de Florida hasta su robo en 2018, presenta un peculiar déficit pigmentario leucístico y ojos azules. Solo hay 11 ejemplares de aligátor leucísticos localizados en todo el mundo. El extraño caso de su robo sin resolver sigue abierto y se ofrecen 7.500 dólares de recompensa.

En esta increíble imagen, tres cachorros de zorros rojos muestran una genética de color caprichosa, con un ejemplar melánico y otro color canela. La adorable imagen fue capturada por Max Waugh en la región del Noroeste del Pacífico.

Muy conocida por quienes realizan seguimiento a estos animales de colores inusuales es Migaloo, una ballena jorobada leucística cuyos avistamientos en Australia se siguen con verdadero entusiasmo y se ha convertido en un icono. 

En España, no es difícil ver ejemplares melánicos entre la población de víboras de Seoane, o de la culebra de collar mediterránea o lagartijas roqueras. En esta entrada de Bicheando, recogen algunos ejemplares ibéricos de reptiles y anfibios con esta aberración cromática.

Impresionante ejemplar de lobo melánico en un parque nacional de Minnesota. La mutación del melanismo en las poblaciones de lobos y coyotes se introdujo a través de la hibridación con perros domésticos, siendo más comunes estos ejemplares oscuros en América del Norte. Para acceder al estudio, clic aquí. 

Esta preciosa cebra con pseudomelanismo y con puntos en lugar de rayas nació en 2019 en Masái Mara, la reserva nacional de Kenia. Se bautizó como Tira, y afortunadamente sigue viva junto a su manada.

La imagen de una hembra de aguilucho cenizo melánica fue capturada en el Empordá por Joan Goy. Esta rapaz, en declive en nuestra región y de hábitos migratorios, invernará en el Sahel africano.

Es tal el furor que (nos) provocan estas anomalías de color en la naturaleza, que en Twitter existe el hashtag #MelanicTeam para darnos aviso con cada publicación sobre un animal, y también entre la flora, que muestre una mutación excepcional de color y que los convierte, por extraordinarios, en ejemplares únicos y cautivadores.

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