El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó este jueves el proyecto estratégico España 2050, un documento estructurado en torno a nueve retos para modernizar España en los próximos 30 años y que Sánchez, durante su discurso, quiso comparar en repetidas ocasiones con el impulso que experimentó España tras el fin de la dictadura. "Hace 40 años nos pusimos de acuerdo para transformar España, así que sentémonos y decidamos qué España queremos ser dentro de 30 años", planteó.

Tras unas semanas de reveses para el Gobierno, Sánchez presentó el plan con la solemnidad de las grandes ocasiones en un acto en el Museo Reina Sofía de Madrid, en el que estuvo acompañado por las cuatro vicepresidentas -Carmen Calvo, Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera- y por multitud de empresarios y dirigentes políticos. El plan, según lo definió el presidente, busca establecer las líneas maestras de la que debe ser para el Ejecutivo la política a seguir a largo plazo. Y, en un momento de "transformación" como la que está experimentando el mundo por la crisis del coronavirus, es una hoja de ruta para poner el país a la "vanguardia", en palabras de Sánchez.

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El documento España 2050 ha sido elaborado en el último año por más de un centenar de expertos y profesionales, a los que Sánchez quiso agradecer un trabajo realizado "con total independencia y sin cobrar un céntimo". Los expertos han sido coordinados por la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia País a Largo Plazo de la Moncloa, un órgano creado a principios de la legislatura del que el Gobierno oculta sus integrantes y al que el presidente también felicitó. "Nos cuesta reconocer nuestros propios méritos como país", pero "pocos países tienen algo tan riguroso y concreto como lo que estamos presentando hoy", sostuvo.

El informe, tal y como explicó Sánchez, recoge "50 objetivos para nueve desafíos de país". Entre ellos se encuentra el que, para el presidente, es el primordial: mejorar la educación para "converger con los países europeos líderes". Pero, además, el mandatario afirmó que el país debe encaminarse a ser "más productivo", tener una población mejor cualificada, promover el uso de energías verdes, "preparar el Estado del bienestar para una sociedad más longeva", poner en marcha un "desarrollo territorial equilibrado", "resolver las deficiencias del mercado de trabajo" o "reducir la pobreza, la desigualdad y reactivar el ascensor social".

"Un gran diálogo nacional"

El documento España 2050 hace tan solo una primera aproximación al diagnóstico y las soluciones para estos problemas, afirmó el presidente del Gobierno. "Se trata de una primera propuesta que está viva" y para la que Sánchez quiso convocar "un gran diálogo nacional sobre el futuro del país". E, insistiendo en la idea de que las líneas que traza el plan no son partidistas, sino prioridades para el país,Sánchez se comprometió a "garantizar un debate libre, plural, en el que tengan cabida todas las ideas, todas las posturas" para generar "una estrategia nacional de largo plazo que nos permita fijar prioridades y coordinar esfuerzos".

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Este proceso, explicó el presidente, durará varios meses y estará "abierto" a la participación de ciudadanos e instituciones, y constará de reuniones bilaterales y mesas redondas "que se articularán a través de un centenar de administraciones públicas, empresas, patronales, sindicatos, universidades, think tanks, fundaciones, ONG, asociaciones y partidos políticos" y el impulso de los gobiernos locales y autonómicos.

"Este es un proyecto de Estado y todo el país tiene que formar parte de él", zanjó Sánchez. Y, aunque "habrá quien lo vea imposible en un tiempo tan polarizado como el actual", el presidente del Gobierno se mostró convencido de que es posible establecer las líneas maestras de las políticas de las próximas décadas con consenso. Para ello, pidió, es necesario "alzar la mirada" y superar "los gestos de crispación y enfrentamiento con los que a veces nos castiga el presente".

El el plan, el Gobierno propone prohibir los vuelos cortos que tengan alternativa en tren en menos de 2,5 horas. El objetivo es que se reduzcan dos millones de toneladas las emisiones del sector del transporte.