El PSOE y EH Bildu pactaron este miércoles una moción de censura contra Cristina Ibarrola (UPN), actual alcaldesa de Pamplona. El acuerdo se produce seis meses después de las elecciones locales —en las que UPN salió como la lista más votada con 9 concejales, frente a los 8 de los abertzales— y un mes después de que el socialista Pedro Sánchez saliera investido presidente del Gobierno con el apoyo, entre otros, de Bildu.
Es la primera vez que PSOE y Bildu logran un acuerdo de este tipo después de que, la semana pasada, el PSN facilitara que los abertzales accedieran a la Presidencia de la Federación Navarra de Municipios y Concejos. El Consistorio pamplonés pasará a ser ahora potestad de Joseba Asiron, quien ya fue primer edil en la legislatura 2015-2019.
El PP, desde las elecciones del 28 de mayo, ha intentado impedir en cambio el acceso de los de Arnaldo Otegi a gobiernos locales. En las autonómicas y municipales, Bildu fue la lista más votada en Vitoria-Gasteiz y las localidades de Durango (Vizcaya), Kuartango, Zigoitia, Oyón y Bernedo (Álava), pero los populares entregaron sin condiciones sus votos al PSOE y el PNV para que gobernaran sus alcaldes y reducir así el control institucional de EH Bildu.
La socialista Maider Etxebarria (PSE-EE) se convertía así, el pasado mes de junio, en alcaldesa de la capital vasca frente a Rocío Vitero (EH Bildu), cuya lista fue la más votada. En concreto, los abertzales obtuvieron siete concejales frente a los tanto del PSE, como de PNV y PP. El apoyo de los nacionalistas vascos y de los populares otorgó entonces a Etxebarria la mayoría absoluta necesaria para gobernar.
Municipios para el PNV
Los de Alberto Núñez Feijóo también dieron su apoyo en otros municipios vascos a favor del PNV, evitando así alcaldías de Bildu. En Vizcaya, los jeltzales recuperaban la alcaldía de Durango, en detrimento de EH Bildu, después de que Carlos García, el único concejal del PP en el Ayuntamiento, apoyara a la candidata del PNV, Mireia Elkoroibide.
EH Bildu fue la lista más votada con 9 concejales, mientras que el PNV logró 8 ediles. Por su parte, el PSE consiguió 2 representantes, mientras que Herriaren Eskubidea y el PP alcanzaron un asiento cada uno. Tras los comicios, el representante del PP ya anunció que otorgaría su apoyo a la candidata del PNV con el objetivo de desalojar a la coalición soberanista del poder. En concreto, Bildu consiguió 5.434 votos, PNV 5.081, PSE-EE 1.182, Herriaren Eskubidea 946, el PP 881 y Elkarrin Podemos 645.
En Álava, por su parte, los nacionalistas vascos lograron los ayuntamientos de Kuartango, Zigoitia, Oyón y Bernedo, también gracias al voto del PP.
En Kuartango, Bildu obtuvo 109 votos, PNV 99, PP 32, Andagostes 26 y PSE-EE tan solo 1. En Zigoitia, Bildu obtuvo 358 votos, PNV 356, PP 86 y PSE-EE 61. En Oyón, Bildu consiguió 504 votos, PNV 378, PP 255, PSE-EE 192 y Podemos 94. En Bernedo, PNV obtuvo 91 votos y Bildu 70 (ambos partidos tienen tres concejales), mientras que el PP 29 y el PSE-EE 17.
Ninguna de las decisiones tomadas por el PP en País Vasco fue una sorpresa. Un mes después de los comicios del 28 de mayo y a días de producirse las elecciones generales del 23 de julio, Feijóo pedía frenar a Bildu ante la velocidad a la que avanzaba, "peligrosísima para las libertades" y aseguraba que su partido era garantía de cambio ante un PNV incapaz de sacar mayorías absolutas.
Este miércoles, tras conocer el acuerdo entre socialistas y abertzales en la capital Navarra, Feijóo no dudó en tachar el pacto de "encapuchado". "Pedro Sánchez elige bando y es el precio que exigieron los socios del PSOE para comprar la Presidencia del Gobierno. Eso sí, ha querido dejar claro que no le saldrá bien ni gratis", aseveró.
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