La Policía Nacional ha detenido en Madrid y Valencia a dos jóvenes que se las ingeniaron para crear un servicio de estupefacientes a domicilio, el telecoca, al contratar a empresas de transporte para enviar droga a terceros sin salir de casa.

La llamada de advertencia al 091 de los repartidores, que sospecharon del contenido de los paquetes, permitió los arrestos, según ha anunciado este viernes tras el comité de seguimiento de la pandemia el director adjunto operativo de la Policía, José Ángel González.

Ha explicado en rueda de prensa que se trata de una alternativa novedosa al tráfico de estupefacientes por parte de falsos mensajeros que, para continuar con el menudeo, simulan distribuir comida, cuando en realidad ocultan la droga en las mochilas de reparto.

González ha reiterado que, pese a las restricciones del estado de alarma, "algunos delincuentes se han esforzado en poner en práctica formas para seguir delinquiendo".

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Sobre los casos de robos en farmacias, el número dos de la Policía ha asegurado que se han reforzado las medidas de prevención en el marco del Plan Comercio Seguro.

"Las patrullas han incrementado los contactos con el sector para informar de las medidas de seguridad oportunas", ha subrayado González, que ha lanzado así un mensaje de tranquilidad a los farmacéuticos, "y a la vez de gratitud por la esencial labor" realizada.

Durante la intervención el comisario ha lamentado la muerte a causa del coronavirus de Juan José Hernández, policía de 56 años de la unidad de guías caninos de Madrid.

En números, según ha indicado González, la Policía detuvo este jueves a 70 personas, que elevan el recuento a 2.981, y sancionó a 4.025, mientras que en las fronteras con Francia y Portugal los agentes controlaron 17.512 vehículos, denegaron 137 entradas y registraron dos arrestos.

De cara a un nuevo fin de semana, el séptimo desde la aplicación del estado de alarma, el general Santiago ha recordado que los controles seguirán en las carreteras para evitar los desplazamientos a segundas residencias.