En las últimas semanas, los casos de avistamientos de carabelas portuguesas y otras especies de medusas en las playas de España se están multiplicando. ¿Qué está pasando? ¿Hay más medusas este verano? No hay una respuesta fácil a esas preguntas, pero lo que está claro es que el calentamiento del agua del mar y la desaparición de los depredadores naturales de las medusas, como las tortugas marinas, son dos factores que pueden tener algo que ver.
Lo que sí está claro es que la psicosis se ha instalado entre muchos bañistas. El miedo a darse un chapuzón comienza a ser más que evidente entre muchas personas. El desconocimiento y falta de información, así como los últimos casos mediáticos de la peligrosa carabela portuguesa en las playas españolas, no ayuda.
Conocer los riesgos y peligros reales con las medusas en España es fundamental para combatir la desinformación, las 'fake news' y leyendas urbanas que se propagan sin control alguno. Y es que, pese a haber varias especies venenosas, no hay motivos para temer darse un chapuzón en la playa. A pesar del ruido que generan, los casos de fallecidos a causa de picaduras de medusas en España no son nada habituales.
Las medusas más peligrosas que podemos encontrarnos en las playas de España
Al igual que pasa con otros animales, las picaduras de las medusas pueden resultar muy molestas y dolorosas. Sus efectos, por lo general, son pasajeros y no suelen ser mortales, pero suponen ciertos riesgos.
La carabela portuguesa (physalia physalis)
La carabela portuguesa, tan en boca de todos en las últimas semanas, es la especie más peligrosa de todas las que se pueden encontrar en las aguas españolas. Es más típica en zonas de aguas templadas del océano Atlántico, pero cada vez es más frecuente encontrarla en el Mediterráneo. El peligro de la carabela portuguesa es el potente veneno de sus tentáculos. Una picadura de la physalia physalis, como se la conoce por su nombre científico, puede causar dolores intensos, laceraciones en la piel y producir una fuerte quemazón en la piel.
Es muy fácil reconocerlas gracias a su 'vela' (una especie de flotador sobre la superficie del agua), su color violeta y unos largos tentáculos que pueden llegar a medir incluso 20 metros.
La medusa luminiscente o pelagia noctiluca
Otra de las medusas más peligrosas es la pelagia noctiluca, también conocida como medusa luminiscente. Son fáciles de reconocer porque tienen su superficie cubierta de verrugas y largos tentáculos. Suelen ser habituales verlas en mar abierto, pero a veces se acercan a la costa en verano.
La picadura de la medusa luminiscente provoca irritaciones y escozor en la piel. Puede incluso causar heridas abiertas y su veneno pude también llegar a provocar problemas cardiovasculares, dermatológicos y respiratorios en casos extremos.
Medusa cubo (carybdea marsupialis)
A esta medusa también se la conoce como la medusa avispa. Tiene un color y luminosidad que la hace hipnóticamente bella, pero... ¡cuidado!, es tan bonita como venenosa. A pesar de su reducido tamaño, de unos cinco centímetros, su picadura es capaz de provocar un dolor profundo y dermatitis severa. Además, según la persona, puede provocar graves problemas de salud, según explican en Meteored.
Se encuentra a profundidades de 20 metros, pero también puede encontrarse en nuestras costas. Se caracteriza por tener un "ojo" que le permite reaccionar al movimiento de objetos y cambios de luminosidad.
Medusa aguaviva, gigante o rhizostoma pulmo
Su tamaño es enorme, puede llegar a medir 40 centímetros de diámetro. Se trata de la medusa aguaviva, una de las medusas más grandes que habitan nuestras costas. No es de las más peligrosas, pero rozar uno de sus tentáculos puede acabar con fuertes irritaciones en la piel.
Es fácil de identificar gracias a su tamaño, su color blanco azulado con un remate en los bordes de la 'cabeza' de color violeta y unos tentáculos voluminosos.
Medusa huevo frito (cotylorhiza tuberculata)
La medusa cotylorhiza tuberculata, más conocida popularmente como la medusa huevo frito por su semejanza con este popular plato español, es otra de las grandes conocidas en nuestras costas. Sin ir más lejos, este verano hubo una plaga en el Mar Menor de esta especie de medusas.
Tiene un color entre marrón y amarillo, con una especie de protuberancia central con forma de yema de huevo. Mide unos 35 centímetros, habita tanto en el mar abierto como en zonas costeras, y es muy común en el Mediterráneo. Su picadura es molesta, pero no es especialmente venenosa.
Estas son las especies de medusas más frecuentes en las costas españolas
Según datos del Instituto de Ciencias del Mar estas son las especies de medusas más frecuentes que podemos encontrar en las playas de España.
- Carabela portuguesa - Es la más peligrosa de todas y su picadura es muy urticante. Puede tener tentáculos de hasta 20 metros, pero se caracteriza por tener un flotador por encima de la superficie del agua con forma de vela y de color violeta. Afortunadamente, es poco frecuente en nuestras playas o aguas.
- Pelagia noctiluca o medusa luminiscente - Su picadura es muy urticante y es muy frecuente en nuestras aguas. Tiene un color rosado cuando es adulta y marrón si es joven. Puede alcanzar un diámetro de hasta 20 centímetros.
- Medusa compás o chrysaora hysoscella - Muy urticante y rara en España. Es de color amarillento con franjas marrones. Recuerda a un paraguas. Puede alcanzar hasta 24 centímetros.
- Medusa cuz - Tiene una picadura muy urticante. La buena noticia es que es poco frecuente en las playas de España. Es translúcida, pero tiene unos tentáculos de color morado.
- Medusa cubo, también conocida como avispa de mar - No es frecuente verla por nuestras playas, pero es muy urticante. Tiene forma cúbica, translúcida, de color azulado o blanquecino y tiene cuatro tentáculos largos bien definidos.
- Medusa acalefo azul - Muy frecuente y urticante. Llega a alcanzar los 40 centímetros y es de color blanca azulada.
- Medusa gigante o rhizostoma pulmo - Es una medusa rara en nuestras costas, pero su picadura es urticante. Es muy grande. Llega a alcanzar hasta 60 centímetros. Es de color blanco azulado.
- Medusa huevo frito - Muy frecuente en España (estos días hay una plaga en el Mar Menor en Murcia), su picadura es poco urticante. Tiene un color marrón amarillento y una protuberancia en el centro con forma de yema y de color más oscuro.
- Medusa luna o aurelia aurita - Es bastante frecuente en nuestras aguas y es translúcida. Por suerte, es poco urticante.
- Discomedusa - Es una medusa poco urticante y poco frecuente. Suele tener un tamaño de 10 a 15 centímetros de diámetro.
- Medusa aequorea - Bastante frecuente y poco urticante, es translúcida. Tiene bastantes tentáculos y canales radiales de color azul.
- La medusa vela púrpura o barquitas de San Pedro - Es muy frecuente en España y la picadura es poco urticante. Es azulada y cuenta con una especie de vela sobre la superficie del agua.
- Medusa porpita porpita o botón azul - Es muy rara pero muy vistosa y bonita. Es de color azul intenso y suele vivir en mar abierto. Es pequeñita, cinco centímetros. Su picadura es poco urticante.
- Medusa peine o bombilla - No es urticante y es poco frecuente encontrarla. Tiene una forma ovalada y un tamaño de 12 centímetros aproximadamente.
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