Todo el país espera estar en la última fase de la desescalada el próximo lunes, salvo Madrid y el área metropolitana de Barcelona y Lleida. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, confirmó este martes que la entrada en la "nueva normalidad" supondrá el fin de las restricciones a la movilidad interprovincial, lo que llegaría con algunos territorios, como Barcelona y Madrid, sin haber pasado de la fase 2 a la fase 3.

Comunidad de Madrid

La Comunidad de Madrid ha sido la última en decidirse y, tras un debate interno en el propio Gobierno regional, el Consejo de Gobierno no pedirá el pase a la fase 3 el lunes, ni en principio tampoco baraja pedir ninguna medida en concreto para flexibilizar la fase 2, como dijo la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso.

"No se ha planteado la posibilidad de pasar a la fase 3 porque a partir del 21 de junio, si todo va según lo previsto, el estado de alarma decaerá y con él decaerá el sistema de fases", ha señalado este miércoles el vicepresidente y portavoz del Ejecutivo, Ignacio Aguado.

Aguado, que ya había dicho días antes que no era partidario de acelerar el paso de la región a la fase 3 porque los quince días previstos para avanzar entre los distintos escenarios no son "por capricho", sino por el periodo de incubación del virus, que marca cómo desescalar. Sin embargo, Ayuso y el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, evidenciaron sus discrepancias sobre este tema a principios de semana, ya que la primera abogó por ir "poco a poco" y el segundo planteó pedir el progreso de fase.

Castilla y León

A petición del Ministerio de Sanidad, Castilla y León sí que pedirá un salto anticipado de la fase 2 a la fase 3 para este lunes 15 de junio. De este modo, la región habría estado solo una semana en la segunda fase. Fuentes del gobierno regional han informado de que, en todo caso, el salto traería "limitaciones" propias para Castilla y León relacionadas con la "movilidad" y con el "ocio", según apunta la prensa local.

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha explicado que los datos epidemiológicos y sanitarios lo avalan, y aunque siempre ha apostado por la prudencia, dejando pasar 15 días entre fase, ahora van a "arriesgar un poquito" y pedir ese pase a la tres para el próximo lunes.

Cataluña

La Generalitat de Catalunya sin embargo, ha optado por no solicitar el paso de Barcelona y su área metropolitana a la fase 3, y mantenerse en la fase 2 hasta el día 21 de junio, fecha en la que de todas formas decaerá el estado de alarma. Y han solicitado al Ministerio de Sanidad que el próximo lunes solo avancen a la fase 3 las regiones sanitarias de la Catalunya Central y Girona.

Sin embargo, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, el Gremio de Restauración y otros sectores económicos de la Ciudad Condal habían presionado para que el área metropolitana pudiera progresar el lunes a fase 3 argumentando que el índice de contagios en la ciudad es bajo. 

Mientras, el jefe de Epidemiología del Hospital Clínico de Barcelona, Antoni Trilla, cree que es "mejor y más prudente" mantener las regiones sanitarias de Barcelona y Lleida en fase 2 hasta el 21 de junio. "Serían 14 días, el plazo más ortodoxo" para cambiar de fase, ha dicho el asesor del Gobierno.

Galicia

En Galicia sí que pretenden cambiar de fase el próximo lunes, según ha asegurado el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que ha detallado que así lo pedirán si se mantiene la tasa de contagio en 0,4 por cada 100.000 habitantes. Además, estudia dejar sin efecto el estado de alarma el próximo lunes y la decisión se adoptaría en la reunión de su gabinete este viernes.

Andalucía 

Toda Andalucía se encuentra en fase 3 desde el pasado lunes y así se mantendrá hasta el final del estado de alarma. Los andaluces pueden moverse ya por la comunidad con total libertad y deben hacerlo, según ha instado el presidente Juanma Moreno, con máxima responsabilidad para evitar nuevos focos de contagio.

La Junta ha hecho este llamamiento a la población porque se prevén muchos desplazamientos por el puente festivo del Corpus Christi.

Comunidad Valenciana

Donde no ha habido dudas ha sido en la Comunidad Valenciana, que ya ha enviado a Sanidad toda la documentación para progresar de fase 3 a partir del próximo lunes con movilidad entre las tres provincias.

De conseguirlo, el president de la Generalitat, Ximo Puig, planteará iniciar la movilidad exterior de su comunidad con la Región de Murcia y Baleares y posteriormente con Castilla-La Mancha y Aragón, aunque en una fecha aún por decidir.

La movilidad entre el País Vasco y Cantabria

Sobre la movilidad entre Euskadi y Cantabria, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha dicho este miércoles que espera que el próximo lunes se pueda permitir el tránsito entre ambas comunidades, pero ha asegurado que analizará "todos los datos" para que esa circulación de personas "tampoco pueda generar una situación no deseada en ninguna otra comunidad".

Urkullu ha señalado que ha mantenido "varias conversaciones" con el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y ambos han manifestado en la conferencia de presidentes del pasado domingo que, "si las circunstancias lo permiten, el lunes" pudieran "posibilitar la movilidad" entre las dos regiones, ya que ambas están en fase 3.

Sin embargo, el consejero cántabro de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha manifestado que el brote de Covid en dos hospitales del País Vasco "influye" a la hora de tomar esa decisión. Ha reconocido que a la hora de pedir que se pueda transitar del País Vasco a Cantabria, el hecho de que haya dos focos de contagio en el País Vasco "influye técnicamente", pero también cree que hay que tener en cuenta que se enmarcan en el ámbito sanitario, ya que se han producido en los hospitales de Basurto y Txagorritxu.

Castilla-La Mancha 

Por su parte, el Gobierno de Castilla-La Mancha solicitará que Toledo, Albacete y Ciudad Real pasen a la fase 3, en la que ya están las otras dos provincias de la comunidad autónoma.

Ceuta

También pedirá pasar a la fase 3 el presidente de la ciudad autónoma de Ceuta, Juan Jesús Vivas, que ha apelado a la "responsabilidad y prudencia" de los ciudadanos para impedir que se produzcan nuevos rebrotes.

Precisamente la aparición de nuevos contagios obligaron a Ceuta a permanecer una semana más en la fase 2, pero Vivas ha asegurado que las circunstancias "han cambiado", ya que la ciudad lleva cinco días sin ningún positivo.