El Gobierno envió a las organizaciones agrarias la semana pasada un documento en el que plantea 43 medidas para tratar de zanjar la crisis del campo. Así lo ha dado a conocer este lunes el ministro de Agricultura, Luis Planas, en una rueda de prensa en la que ha informado sobre la propuesta, que incluye iniciativas que van desde la simplificación de la Política Agraria Común (PAC) hasta medidas fiscales y más financiación. "Constituyen un conjunto sólido de medidas que responden a las principales preocupaciones manifestadas por los agricultores y ganaderos", ha asegurado el ministro.
El texto remitido por Agricultura a las tres principales organizaciones agrarias con las que mantiene interlocución -Asaja, COAG y UPA- recoge las medidas aprobadas la semana pasada en Bruselas por parte de los ministros comunitarios para simplificar la PAC. Este acuerdo flexibiliza algunos de los requisitos exigidos para acceder a las ayudas europeas, como la rotación de cultivos o la obligación de dejar una parte del suelo sin cultivar, a la vez que exime de controles a los pequeños agricultores con menos de 10 hectáreas cultivadas.
Planas ha recalcado que estas medidas adoptadas a nivel comunitario serán las más "inmediatas" y que tendrán efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2024, aunque todavía están pendientes de ratificación en el Parlamento Europeo, un trámite que se ha mostrado confiado en superar. "Que los agricultores y ganaderos tengan por seguro que esos temas que aprobamos en Bruselas se van a llevar adelante. Quiero dar un mensaje de tranquilidad y seguridad. Se van a aplicar sí o sí", ha recalcado.
Además de la simplificación y flexibilización de la PAC, la propuesta del Ministerio de Agricultura para zanjar la crisis del campo incluye también medidas en materia fiscal y de financiación. En concreto, Planas ha puesto sobre la mesa una nueva línea de créditos ICO de hasta 700 millones de euros para agricultores y ganaderos, de los cuales 200 millones irán destinados a jóvenes agricultores, con el objetivo de facilitar el relevo en el sector. En materia fiscal, el ministro ha avanzado que se ha estudiado la posibilidad de aumentar las deducciones en la factura de carburantes y fertilizantes al 35% y 15% respectivamente, una bonificación que ha estimado en 575 millones de euros.
Según el planteamiento de Agricultura, el Gobierno se compromete también a ampliar al "máximo posible" su aportación a los seguros agrarios, aunque anima a las comunidades autónomas a que imiten el esfuerzo para elevar la dotación global. "Estamos dispuestos a llevar la subvención a las pólizas al máximo posible, pero contando con el apoyo de las comunidades autónomas", ha matizado Planas.
La propuesta conocida este lunes recoge también las medidas que ya se pusieron sobre la mesa en febrero en la oferta inicial del ministerio tras reunirse con Asaja, COAG y UPA. En ese sentido, se reitera la voluntad de reforzar la aplicación de la ley de la cadena alimentaria mediante la transformación de la actual Agencia de Información y Control Alimentario (AICA) y el compromiso de convocar en los próximos meses una conferencia sectorial sobre jóvenes agricultores para abordar el asunto con las comunidades autónomas.
También se prevé la creación de un grupo de trabajo para el seguimiento de las importaciones y exportaciones. No obstante, en el ámbito comercial, Planas ha reconocido que habrá que esperar al menos hasta la próxima legislatura europea para que se puedan materializar las cláusulas espejo, una de las grandes reivindicaciones del sector para exigir que los productos importados cumplan los mismos requisitos que los cultivados en suelo comunitario. El ministro ha asegurado que esta aspiración está "más cerca" y se ha mostrado optimista, aunque ha advertido de que su materialización depende en buena medida de la aritmética parlamentaria que resulta de las próximas elecciones europeas.
Planas ha calificado la propuesta del Gobierno de "ambiciosa" y ha señalado que ahora corresponde a las organizaciones aceptarla o no, así como decidir sobre el fin de las movilizaciones. El ministro ha asegurado que el contacto con Asaja, COAG y UPA es "permanente" y ha señalado que en los últimos dos meses han mantenido una quincena de reuniones a nivel técnico, además de las tres celebradas al más alto nivel.
"Espero que seamos capaces por un momento de parar el conflicto permanente que tenemos en nuestro país desde el punto de vista político, que se arríen las velas y que podamos llegar a un acuerdo", ha expresado, afeando a PP y Vox que traten de sacar rédito político de las protestas. "Lo que hagan las organizaciones agrarias les corresponde a ellas, si están de acuerdo nos veremos de nuevo y ratificaremos este acuerdo, que es lo que yo desearía, pero no quiero forzar ninguna situación". "Hablo de hechos y no de palabras que pensamos cumplir si las organizaciones agrarias lo estiman oportuno", ha añadido.
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