El gato altái de ojos azules, una rareza genética que inicialmente se consideró una leyenda

  • En el 2023 se aislaron tres mutaciones de gatos de ojos azules y las tres eran distintas entre sí.
Aunque quedan criadores activos de altái, actualmente se están introduciendo en razas ya existentes para que aporten el gen dominante de ojos azules.
Aunque quedan criadores activos de altái, actualmente se están introduciendo en razas ya existentes para que aporten el gen dominante de ojos azules.
20minutos
Aunque quedan criadores activos de altái, actualmente se están introduciendo en razas ya existentes para que aporten el gen dominante de ojos azules.

Los gatos blancos o con patrón colourpoint de ojos azules son una presencia común, pero cuando se encuentran gatos de colores oscuros con ojos del mismo tono, su rareza puede sugerir inicialmente algún tipo de condición de salud subyacente.

Este fue precisamente el pensamiento de Lyubov Borisovna Zikeeva en 1997, residente de Kazajistán, al toparse con una colonia de gatos callejeros en una fábrica. Entre una variada paleta de pelajes, un rasgo destacaba: la abundancia de ojos azules. Aunque ella misma estaba familiarizada con el mundo felino y la genética, siendo criadora de gatos, Zikeeva fue ignorada cuando alertó a la asociación de registro felino de Kazajistán sobre este fenómeno. La razón: los gatos de ojos azules sin el característico pelaje blanco simplemente no eran considerados posibles.

No obstante, este no fue el primer avistamiento de gatos de pelaje oscuro con ojos azules. En 1984, una famosa revista estadounidense de gatos presentó a los 'Ojos azules', una raza autóctona de Nuevo México con la que se iniciaba un programa de reproducción.

Fue en 2004 cuando finalmente se escuchó a Zikeeva y se realizaron pruebas de ADN a sus gatos de ojos azules. Estas pruebas revelaron que las dos mutaciones conocidas, la de Nuevo México y la de Kazajistán, ocurrían en regiones genéticas distintas y eran mutuamente incompatibles. Ambas, sin embargo, eran genes dominantes que se sobreponían a ojos amarillos, cobres y verdes.

La raza norteamericana de ojos azules no prosperó debido a que este gen también conllevaba anomalías congénitas graves, lo que resultaba en un alarmante número de malformaciones y, por tanto, un programa reproductivo inviable. Sin embargo, persistieron los altái, cuyo alelo es una variante del gen de manchas blancas. Conocido como el gen Altai, este es menos dominante que el gen de manchas blancas común que produce la coloración bicolor típica en los gatos. Además, el gen Altai puede interactuar con el gen de manchas blancas sin causar anomalías genéticas.

Aunque solo unos pocos criadores continúan la cría de la raza en Rusia y Ucrania, el gen de los altái se está utilizando para introducir los ojos azules en numerosas razas felinas, como los exóticos de pelo corto, los rex o los maine coon. Los altay-blue eyed, conocidos internacionalmente como ABE, fueron reconocidos como nueva raza en 1999 por la Russian Selectional Feline Federation (SFF). Pueden tener colores sólidos (excepto el blanco sólido, que no está admitido), atigrados (tabbies) y tricolores con la punta de la cola blanca. Se acepta la heterocromía, pero los ejemplares con ambos ojos azules y sin manchas blancas en el cuerpo son los más deseables.

Sociables y enérgicos

Los gatos altái se destacan por su tolerancia con niños de todas las edades y otros animales del hogar. Son descritos como animales afectuosos, seguros de sí mismos y curiosos, que rápidamente establecen un vínculo cercano con su familia humana.

A pesar de ser considerados activos y necesitar un entorno estimulante adecuado, no requieren de grandes espacios y se adaptan fácilmente a cualquier entorno doméstico. Además, su pelaje corto no exige cuidados especiales, más allá de cepillados ocasionales similares a los que se harían con cualquier otro felino.

En cuanto a su salud, hasta 2030 se permitirá el cruce de los gatos altái con ciertas razas para continuar fortaleciendo las características morfológicas y la variabilidad genética. Sin embargo, posteriormente a esa fecha, solo se permitirán cruces entre ejemplares de la misma raza, de acuerdo con las regulaciones de la Asociación Felina Internacional (MFA), sucesora de la CFF. No se deben cruzar dos altái de ojos azules para evitar problemas hereditarios de sordera.

Para ampliar información sobre la raza altái, se recomienda contactar con la mencionada MFA. Si se valora la adopción, presentamos a Tahisi, que se encuentra en Cuenca pero puede viajar, y necesita un hogar definitivo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento