Madrid ha vuelto a soñar. Tras tres décadas y cuatro intentos fallidos por albergar unos Juegos Olímpicos, esta semana la región ha recuperado la ilusión con la confirmación del Mundial 2030 para la candidatura conjunta de España, Portugal y Marruecos. Aunque la presidenta de la Comunidad y el alcalde de la capital, Ayuso y Almeida, ya celebran que la final se dispute en el Santiago Bernabéu, todavía no hay ninguna certeza oficial. Sí parece seguro, mientras los tres países pujan por auspiciar el partido de mayor importancia, que la urbe tendrá un gran protagonismo. Y, por ende, un impacto económico multimillonario. Es lo que los principales agentes del sector turístico llaman: El 'efecto Mundial'.

Los beneficios de un campeonato del mundo no se miden únicamente durante las fechas del torneo, sino también a medio y largo plazo, explica Luis Martín Izquierdo, director general de Turismo de la Comunidad de Madrid. Si para final de 2023 se prevé que el turismo inyecte 15.000 millones de euros en la urbe, un evento de estas características "puede suponer un incremento en los años siguientes de hasta un 15 % más. Es decir, 1.000 o 2.000 millones, más allá de la competición en sí y a falta de conocer sus detalles del calendario". 

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Además de dinero, mucho dinero, el segundo Mundial, después del celebrado en 1982 con el icónico Naranjito, planteará un rosario de retos que la región tendrá que afrontar. A siete años vista, los principales agentes turísticos analizan si Madrid está preparada para superarlos: 

AGENCIAS DE VIAJES 

• "Una de las críticas al Mundial de Qatar fue que había que construir prácticamente todo. En Madrid, no".

CÉSAR GUTIÉRREZ CALVO

La infraestructura, a priori, no tiene que ser un problema, según César Gutiérrez Calvo, presidente de la Federación madrileña de agencias de viajes. "Una de las críticas al Mundial de Qatar fue que había que construir prácticamente todo. Y muchos de esos estadios luego no se han utilizado. Madrid está totalmente preparada, con el Bernabéu y el Civitas Metropolitano, y para 2030 lo estará aún más". 

No solo en lo que tiene que ver con estadios, también en su tejido de  hoteles, con más de 30 proyectos de inversión en camino. A cierre de 2022, la ciudad contaba con más de 800 establecimientos hoteleros y 75.800 plazas turísticas disponibles, tal y como recoge el Anuario de Turismo de la capital. En ese año, de acuerdo con Instituto Nacional de Estadística, la capital recibió a 3.496.601 viajeros en todos sus hoteles, un 110% más que en 2019 (curso de referencia, previo a la pandemia). 

AEROPUERTO  

• "Espero que Iberia vuele a muchas selecciones".

VÍCTOR MONEO

Los aeropuertos españoles, con Barajas como punta de lanza, también están "perfectamente preparados", de acuerdo con Víctor Moneo, director de Alianzas y Acuerdos Estratégicos de Iberia. "Cuando viajas por otros países y ves lo que tenemos en casa es cuando te das cuenta de que tenemos lo mejor de lo mejor", dice. Estas instalaciones son "un ejemplo en cuanto a tecnología y sencillez de uso". Para el Mundial prevén un incremento de la oferta de vuelos regulares, así como otros especiales. Y, por qué no, esperan volar a selecciones de distintos países hasta los lugares donde se jueguen las eliminatorias.

Capacidad aeroportuaria: "Cuando viajas por otros países te das cuenta de que tenemos lo mejor de lo mejor"

HOSTELERÍA 

• "Lo más importante es no fallar"

JOSE ANTONIO APARICIO 

La gastronomía es otro de los platos fuertes de la región. Aunque siempre se puede perfeccionar la receta. Para Jose Antonio Aparicio, presidente de Hostelería Madrid, el Mundial es "una excelente justificación mejorar la planta hostelera madrileña mirando a siete años. Madrid tiene una oferta muy diversa, pero hay que hacer un esfuerzo por facilitarle la lección al visitante y que pueda diferenciar bien la gastronomía por su tipología o reconozca las nuevas tendencias", comenta.

El gran reto de los hosteleros será, como es costumbre en los eventos deportivos, la seguridad. "Cada eliminatoria de Champions League en Madrid es una gran preocupación", advierte Aparicio, justo unas horas después de la bochornosa quedada entre los hinchas del Feyenoord y los del Atlético de Madrid para liarse a puñetazos antes del partido. Las aficiones de los equipos de futbol son, de todas formas, más radicales que las de los combinados nacionales. "En los torneos de selecciones no suele haber muchos enfrentamientos", reconoce. El líder de los hoteleros cree que esto podría solucionarse "adelantando la hora de ir al campo una o dos horas", justo cuando más suele haber consumido los seguidores. También espera que se regule "con mayor claridad" si se pueden sacar las bebidas de los locales. Y propone un protocolo ad hoc para esos días de torneo en materia de ruido u horarios. De todas formas, "habrá que decidirlo en el entorno de 2030".

Menos radicales: "En los torneos de selecciones no suele haber muchos enfrentamientos"

Lo más importante para Aparicio "como empresario es cumplir con la expectativa que va a generar el Mundial". Desde su gremio, calculan que el campeonato del mundo podría suponer 12,8 millones de gasto en restauración por cada partido en cada una de las dos sedes, el Bernabéu y el Metropolitano, con 80 mil asistentes de aforo medio. "El gasto medio mínimo por turista será de 80 euros, con 2 ó 3 días de estancia promedio", comenta quien considera que "lo más importante es no fallar". 

ADMINISTRACIÓN 

• "Con el Mundial, Madrid se pone en el mapa mundial"

LUÍS MARTÍN IZQUIERDO

El Mundial también será un escaparate para la comunidad, que atraviesa un momento muy dulce en términos turísticos. En 2023, se espera que hayan visitado la región 14 millones de personas, cifras que empiezan a pisar los talones a las que cosechan París o Amsterdam. "Un evento así te pone en el mapa mundial porque son miles de millones de personas las que están pendientes de un lugar. Esto tiene muchísimo valor, más allá de los visitantes que pueda generar durante los días de la competición, ya que muchas personas pueden plantearse venir de vacaciones"después", dice el director general de Turismo de la Comunidad, Luis Martín. Todos los agentes coinciden en que "Madrid está preparada".