El miedo al contagio por el virus de la fiebre del Nilo ha obligado a la Junta a hacer un llamamiento a la población de «tranquilidad», ya que, si bien es cierto que «se ha detectado un aumento de los mosquitos transmisores» de este virus en estaciones de trampeo en Málaga, Sevilla y Córdoba, «no se ha detectado todavía que haya una transmisión» en nuestra región, según ha informado la consejera de Salud y Consumo, Catalina García.

En Andalucía hay establecido «un protocolo» desde la Dirección General de Salud Pública, en coordinación con los ayuntamientos», para el que desde hace dos años hay instaladas trampas de estos insectos en 27 municipios de la comunidad, además de la vigilancia entomológica que desarrolla el Servicio de Salud Ambiental en 110 municipios andaluces.

Andalucía detecta circulación del virus de la fiebre del Nilo occidental en mosquitos en una zona de control

Este protocolo permite «una detención precoz cuando empieza a circular el mosquito con más intensidad», con objeto de poder informar a la administración local para que intensifique las acciones de vigilancia, control y comunicación en su territorio, así como los planes específicos de contingencia, disminuyendo la probabilidad de transmisión a humanos. A principios de este mes la consejería de Salud advirtió del inicio de la circulación del virus de la fiebre del Nilo occidental en una de las zonas sometidas a control, según el primer informe de 2023 de vigilancia de esta enfermedad, como informó este medio.

A principios de este mes la consejería de Salud advirtió del inicio de la circulación del virus de la fiebre del Nilo occidental en una de las zonas sometidas a control, según el primer informe de 2023 de vigilancia de esta enfermedad, como informó este medio. La Junta recordó entonces que estas especies de mosquitos pican en horas desde atardecer hasta amanecer, por lo que, especialmente en zonas de riesgo, y recomendaba unas medidas preventivas sencillas, especialmente  aquellas personas que con un sistema inmunitario débil, como son el uso de ropa de colores claros y que cubran la mayor parte de la piel, no usar colonias o perfumes intensos, usar repelentes registrados y otras medidas domésticas como mallas en huecos y ventanas, repelentes, mosquiteras, etc.