Las declaraciones y propuestas del PP parecen una serie entregada por fascículos. Si la serie fuera buena no me importaría tener paciencia para seguir viéndola, pero cada nuevo episodio es peor que el anterior.

Después de buscar el enfrentamiento territorial por ver quien era más macho alfa a la hora de eliminar el impuesto de patrimonio, el Partido Popular nos sorprende ahora con un nuevo episodio: el enfrentamiento intergeneracional, intentando enfrentar a nuestros jóvenes con nuestros pensionistas, haciendo ver a los primeros que los segundos no merecen una actualización de su pensión al IPC, porque el sistema es insostenible, y nada más lejos de la realidad.

La semana pasada el Gobierno presentó por tercer año consecutivo los Presupuestos Generales del Estado en tiempo y forma. En ellos, si los lees sin gafas derechosas, podrás comprobar como ambas cosas son compatibles.

No están en carrera las dos generaciones: se puede cuidar a nuestros mayores y acompañar a nuestros jóvenes

Estos presupuestos llenan, por primera vez en trece años, la hucha de las pensiones con casi 3.000 millones de euros. Pensiones que se revalorizan con el IPC para paliar los efectos de la inflación. En el caso de Cataluña, 1,8 millones de pensionistas se verán beneficiados.

Pero el refuerzo de las pensiones no supone un retroceso en políticas para la juventud. La inversión destinada a proteger a nuestros jóvenes crece un 13%. La partida para las becas aumenta 400 millones, se crean más de 200.000 plazas de formación profesional; y se ha puesto en marcha un bono cultural, un bono de transporte y el bono de alquiler joven, que en Cataluña beneficiará a más de 9.600 jóvenes.

Así que no, no están en carrera las dos generaciones: se puede cuidar a nuestros mayores y acompañar a nuestros jóvenes.