Después de una semana guardando una posición discreta, con motivo de la celebración de la Cumbre OTAN en Madrid, Unidas Podemos se ha lanzado en tromba contra el ala socialista del Gobierno para frenar uno de los compromisos alcanzados durante la reunión atlántica: el aumento progresivo del gasto militar hasta llegar al 2% del PIB en 2029. Con el crédito extraordinario por valor de casi 1.000 millones de euros para Defensa, aprobado este martes en Consejo de Ministros, han aflorado las desavenencias en el seno de la coalición. Tanto en el fondo, como en la forma en la que se ha acometido la inversión. Sin embargo, Unidas Podemos ya ha dejado claro que no abandonará el Gobierno del que forma parte desde 2020.

En rueda de prensa en el Congreso, el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, ha acusado este martes al PSOE de "deslealtad" con las formas empleadas para llevar a aprobación el cheque millonario para el Ministerio de Defensa. Una partida que calificado de "decreto de guerra" y en la que, según el dirigente, la formación morada no ha tenido ni voz ni voto.  Aunque la decisión última corresponde al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Asens opina que un asunto de este calado requiere como mínimo una discusión en profundidad con los ministros de Unidas Podemos, algo que no ha tenido lugar.

En esa misma línea, el dirigente morado ha cargado contra el ala socialista del Ejecutivo por haber eludido consensuar la medida con los ministros del socio minoritario, así como con los grupos del socio de investidura en el Congreso, optando por "aprobar por la puerta de atrás" el incremento del gasto militar. Denuncia idéntica a la que pronunció la ministra y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, hace escasas 24 horas al asegurar que se había enterado del crédito extra por la prensa.

Cabe apuntar que dicho el crédito procede del fondo de contingencia y, por tanto, no requiere de validación por parte del Congreso, con lo que Sánchez soslaya una votación parlamentaria en un asunto que a buen seguro provocaría el rechazo de los socios de gobernabilidad de la Moncloa. 

Por otro parte, el portavoz ha reconocido, en cualquier caso, que la propuesta pasó por la Comisión General de Secretarios de Estado y Subsecretarios, que aborda las materias que llegan al Consejo y de la que su formación forma parte.

Del lado del PSOE, la ministra de Educación Pilar Alegría ha querido desmentir las acusaciones de Podemos, alegando que tienen la "sana costumbre" de explicar a todo el Consejo de Ministros los temas que van a abordar. Asimismo, ha hecho hincapié en que no solo lo trasladan "desde el punto de vista de comentario o charla", sino que los secretarios de Estado y subsecretarios del Ministerio se reúnen semanalmente para abordar los temas que se tratarán el próximo martes en la reunión del Consejo.

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Sea como fuere, el mismo Asens ha rechazado de plano que este choque interno ponga en riesgo la estabilidad del Ejecutivo, donde ha llamado a naturalizar las discrepancias y ha resaltado que el espacio confederal se encuentra "cómodo" pese a rechazar la decisión tomada por el PSOE. "Nos sentimos cómodos en el Gobierno pero nos sentimos incómodos con esta decisión", ha ahondado.

Más fuego cruzado: "Decreto de guerra", "voto ultra"...

Es de sobra conocida la oposición frontal de los morados al compromiso militar que los de Sánchez quieren plasmar en los Presupuestos Generales del Estado de 2023 y que han comenzado por desplegar con este crédito extraordinario. El dirigente de Unidas Podemos lo ha tildado este lunes de "decreto para la guerra" y "bizum" para la industria armamentística. "España no necesita bombas ni cazas de combate" sino más políticas sociales porque "la guerra es con la inflación", ha reivindicado. 

Al tiempo, ha advertido que de continuar la senda de querer "duplicar" el gasto armamentístico, el PSOE se estaría acercando al PP, que ha catalogado de "partido de la guerra". Un argumento similar al que ha empleado el también portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, quien ha asegurado que esta medida va a "dar votos a paladas a la derecha y a la ultraderecha"