Es prácticamente mayo, pero el mal tiempo no abandona la Península Ibérica, que se ve sumida prácticamente en un invierno tardío. Una nueva borrasca ha golpeado buena parte de la geografía nacional y ha dejado innumerables destrozos.

Una de las provincias más afectadas ha sido Almería, donde una granizada ha dejado varias capas de hielo en el suelo y ha destrozado algunos invernaderos en la zona de Níjar. En municipios como Pechina, la tormenta le ha cortado el paso a los vehículos.

En Cóbdar, solo este mes, se han acumulado 500 litros y ahora las calles del pueblo tienen 'canales' y hasta 'cascadas', y el agua incluso salde entre las piedras.

El temporal también ha blanqueado localidades de Málaga, como Gaucín y Casabermeja, y las lluvias han provocado, en el municipio valenciano de Benimamet, el desprendimiento del tejado de una casa. 

En Dos Hermanas, el viento ha dado un empujón a una pantalla en una carrera escolar, aunque, por fortuna, no ha habido heridos.