Las fiestas navideñas son un momento de excesos con la comida. Entre las cenas, los turrones, los polvorones y los roscones de Reyes, es muy normal llegar al año nuevo con unos kilos que antes no teníamos. Ante este inconveniente, algunos optan por apuntarse al gimnasio como uno de sus nuevos propósitos y suelen acudir a dietas extremas para adelgazar.

Jameela Jamil es una actriz muy concienciada con los trastornos alimenticios y la dismorfia corporal, ya que sufrió anorexia en su adolescencia y sus primeros años como adulta. Para evitar que otras personas padezcan lo mismo, desde sus redes sociales se dedica a promover un mensaje de amor propio y a exponer a aquellas famosas que promocionan productos adelgazantes perjudiciales para la salud, como Cardi B y Amber Rose, siendo muy conocida su cruzada contra todo lo que promueven las Kardashian.

Sabiendo todo lo que se avecina estos meses, Jamil ha publicado una foto en Instagram acompañada de un fuerte e inspirador mensaje acerca de los trastornos alimenticios camuflados en la 'cultura de la dieta': "Solía pensar que me veía 'demasiado gorda' en esta imagen. Me había muerto de hambre durante tres semanas y hacía ejercicio compulsivamente antes de esta sesión", comenzaba relatando.

"Los trastornos alimentarios son algo terrible y perturbador. Es por eso que sigo hablando sobre la cultura de la dieta, porque era mi pendiente resbaladiza para perder todo el sentido de la realidad y todo mi tiempo, energía, deseo sexual y alegría", compartía la actriz.

Aunque no hay nada malo en querer mejorar nuestro físico, es recomendable preguntarnos cuál es el motivo por el que queremos cambiar nuestra apariencia: "Pregúntate si está siguiendo a personas en redes sociales que te hacen sentir nutrido y emocionado o avergonzado y asustado. Pregúntate por qué estas haciendo estos cambios, ¿para quién? ¿Qué crees que cambiará en cómo te sientes? ¿Le dirías alguna vez a alguien que amas y respetas que necesita alcanzar los mismos objetivos corporales para poder sentirse bien y seguro?".

El continuo bombardeo de mensajes sobre dietas y ejercicio durante el confinamiento influyó en el desarrollo de TCAs

Durante la pandemia, los trastornos alimenticios se han multiplicado. En la cuarentena, las patologías alimentarias en pacientes próximos a recibir el alta se incrementaron en un 38% , según datos de ALUBA (Asociación Lucha contra la Bulimia y la Anorexia). El sedentarismo, sumado a la ansiedad y el estrés, que pueden desembocar en un atracón emocional, fue el caldo de cultivo perfecto para que se desarrollasen trastornos de la conducta alimentaria (TCA).

El continuo bombardeo de mensajes sobre dietas y ejercicio que se vivió en las redes sociales durante ese periodo, escondidos bajo un estilo de vida saludable, influyó en gran medida en el desarollo de estos trastonos.

Después de las fiestas estos mismos mensajes se repiten, lo que pueden provocar recaídas o nuevos casos. "Sólo sé cuidadoso. Y deja de seguir a cualquiera que te prometa un cambio rápido. Les importa una mierda tu salud física o mental. Solo quieren tu dinero, tu miedo y tu ingenuidad. Cuando financiamos la industria de la dieta/detox a través de diabólicos influencers, financiamos directamente el patriarcado", sentenciaba Jamil.