"Las tres derechas no existen, solo hay dos". Esta frase de Fernando Savater puede tener repercusión en los días, semanas, meses, que quedan para la cita electoral del 28 de abril. Son unos comicios de bloques. De eso no hay duda. Aunque la ruta hacia la Moncloa acaba de empezar, todavía falta por determinar quién será compañero de viaje de quién.

Por ahora, solo se sabe qué amores son imposibles, pero no tanto cuáles pueden funcionar. Ciudadanos ha negado cualquier mano tendida al PSOE ni a Sánchez, mientras que el PP quiere aglutinar el voto en el centro derecha. Los líderes quieren rodearse de afines, y así lo han evidenciado con la composición de las listas, relegando a las voces más críticas.

¿En torno a qué gira el discurso de cada partido?

Optimismo. Esa es la palabra que manejan en Ferraz para la campaña electoral. Pedro Sánchez inició la precampaña con un colorido acto en el que reiteró que en la España que quiere "caben todos y todas", alejándose de un tono bélico, que es precisamente lo que afea a sus adversarios. "El discurso será mucho más optimista y menos ideologizado", apuntan a 20minutos fuentes socialistas.

Son conscientes de que así "queda un pasillo muy ancho que ocupar" sin necesidad de moverse, frente a "tres derechas que solo se entienden entre ellas". Sánchez llega con cierta ventaja. Afronta la campaña electoral después de gobernar, y eso refuerza la posición de la fuerza política. Hay un argumento: conseguir más diputados para seguir con las medidas que no se pudieron hacer con solo 84.

Sánchez insiste en que votar a la derecha es apostar "por la involución" frente a unas propuestas, las socialistas, que buscan que "España avance". Desde Ferraz argumentan que no necesitan moverse "del sitio", y que el discurso tendrá un "contenido social".

El Partido Popular quiere aglutinar fuerzas en torno a su líder. Pablo Casado ha confeccionado sus listas de tal forma que unos hablan de "purga" a los afines a Soraya Sáenz de Santamaría y él prefiere referirse a una "renovación tranquila" que permita la "supervivencia" del partido. Ha vuelto a los orígenes con fichajes como Cayetana Álvarez de Toledo, pero también ha apostado por gente de la sociedad civil como el periodista Pablo Montesinos o el padre de Mariluz, Juan José Cortés.

Tras varias propuestas al inicio de la precampaña (como la revolución fiscal, la medida de apoyo a los pensionistas y una propuesta de ley de apoyo a la maternidad), Casado ha pasado a endurecer su discurso, no solo contra Sánchez, sino también contra Ciudadanos y Vox. Erige al PP como la única alternativa de Gobierno en el centro derecha y habla de voto tanto "útil" como "fiable" de cara al 28 de abril.

Ha centrado su discurso en la defensa de la unidad de España, la puesta en valor de los "milagros económicos" de Aznar y Rajoy y la experiencia de Gobierno de su partido frente al resto de fuerzas. Un lema manda manda entre la dirección del PP desde la Convención: "Menos PP es menos España".

Eso sí, le quedan decisiones por tomar. Habrá nuevas incorporaciones a las listas, y falta por saber la candidatura al Senado y el cabeza de lista para las elecciones europeas. A este respecto, fuentes de Génova piden "paciencia" porque los asuntos van "poco a poco". Casado ha afirmado sentirse "mayoritariamente respaldado" por su partido frente "a los partidos que hacen pucherazos y las formaciones que alientan el transfuguiso o han hecho una purga", en un claro mensaje a Ciudadanos y al PSOE.

"La gente que nos da por muertos está equivocada". Con estas palabras la portavoz de Podemos, Noelia Vera, quiso ayer apagar las voces que pronostican una debacle electoral de la formación morada. Con Pablo Iglesias de baja por paternidad –vuelve este sábado en un acto en Madrid– el partido ha dado notoriedad a su número dos, Irene Montero.

En este contexto, Podemos insiste en que las medidas tomadas por el Gobierno de Sánchez, como la subida del salario mínimo, se dieron porque "se las arrancamos nosotros". Así, la formación quiere ser el vigilante del PSOE y se eleva como "la única alternativa verdaderamente de izquierdas". En torno a la figura de Iglesias, fuentes del partido señalan que se ha querido "dar ejemplo" con el reparto de la baja, pero la dirección es optimista.

El regreso de su líder es "importante" para Podemos, y Vera apuntó que el objetivo es "ponerse las pilas" de cara al ciclo electoral. "Estamos muy vivos y lo vamos a demostrar", sostuvo. Una vez rearmados, la idea de Podemos es dar paso a las propuestas más concretas.

"Ciudadanos va a liderar un nuevo proyecto con personas de la sociedad civil, que saben lo que es trabajar y que pueden ayudar a sacar España adelante". Con expresiones como esta Albert Rivera quiere reivindicar su proyecto y dejar atrás las polémicas sobre las primarias del partido. Uno de los mantras más repetidos por Ciudadanos es "la tercera España", frase usada por el líder para decir que el 28-A no se trata de ir "a izquierda o derecha", sino "hacia adelante".

Marcos de Quinto, Sara Giménez, Joan Mesquida o Edmundo Bal son algunos de los fichajes anunciados por Cs en las últimas semanas. Con ellos, Rivera quiere mostrar una imagen de gobernabilidad, de ahí que su discurso trate, sobre todo, de desgastar a Sánchez y sus contactos con los independentistas.

Fuentes del partido explican a este medio que las tres palabras clave en la precampaña de Cs son "equipo, energía e ilusión". Mantienen lo esgrimido por Rivera: "Estamos trabajando con mucha ilusión para hacer posible el cambio político para una España inclusiva, abierta y moderna". Aseguran que cuentan "con el mejor equipo" y que su agenda es "ilusionante", la necesaria para "las grandes reformas que quedan pendientes".