Por primera vez este año no habrá lidia ni fuera ni dentro de la plaza de toros.
Tampoco se celebrará la subasta de arrastre que se realizaba el 15 de agosto donde las peñas pujaban por arrastrar a los toros y así poder estar en las barreras.
Otra novedad de este año es el tramo de campo que recorrerá el morlaco acompañado por los caballistas que se dejó de realizar los últimos años.
El alcalde afirma que el decreto contraviene la legislación sobre tauromaquia.
Sobre la próxima edición, programada para el próximo 13 de septiembre: "Vamos a trabajar para que se siga celebrando como se ha celebrado durante 500 años".