Rusia elevó este miércoles a 143 el balance oficial de muertos por el atentado en un auditorio de las afueras de Moscú. Más de 70 víctimas continúan aún ingresadas en hospitales por el asalto en el Crocus City Hall. Pocas horas después de tener lugar, el ataque fue reivindicado por la provincia de Jorasán (Khorasan) del Estado Islámico (ISIS-K).
Efectivamente, según funcionarios estadounidenses, los asaltantes de Moscú formaban parte del ISIS-K. Creado en 2014, fue un año más tarde cuando el grupo se identificó formalmente como una extensión del ISIS en Jorasán. Toma su nombre de esta región, término antiguo que designa un territorio que abarca aproximadamente partes de Irán, Turkmenistán y Afganistán, aunque sus actividades se extienden más allá de esta región.
El ISIS-K es una facción de talibanes y miembros de Al Qaeda desertores en Pakistán y Afganistán que adoptaron una interpretación más violenta del yihadismo. Al igual que el ISIS, se suman al objetivo de establecer un califato transnacional, un Estado para los musulmanes gobernado según su propia interpretación radical del Islam.
En junio de 2020, el liderazgo central de ISIS nombró a Sanaullah Ghafari, alias Shahab al-Muhajir, líder de esta rama del Estado Islámico. Actualmenre, el ISIS-K es una de sus facciones más letales. De la mano de Ghafari, este grupo ha estado activo en Afganistán, Pakistán e Irán.
De la Universidad al Ejército
Nacido en 1994 en Kabul, no queda muy claro su origen. Según Reuters, es de etnia tayika; según Sputnik, es pashtún. Otras fuentes afirman que su familia emigró de la India a Afganistán. Su familia vive en Pakistán y es propietaria de una empresa que comerciaba entre este país y Afganistán, contó The Independent Persian.
El ISIS describe a Ghafari como un líder militar experimentado y uno de sus "leones urbanos" en Kabul
Ghafari recibió una educación islámica antes de obtener el título de ingeniero en la universidad de la capital afgana. Se alistó en el Ejército de su país y sirvió como soldado. Según el periódico antes mencionado, en un documento de identidad emitido en 2018, Ghafari se presenta como guardaespaldas de los ex primeros ministros Abdul Rashid Dostum y Amrullah Saleh. No queda claro si el documento era falsificado.
En el ISIS desde 2015
Es en 2015 cuando se une al Estado Islámico para combatir en las guerras de Irak y Siria. El comunicado del ISIS que anunciaba en 2020 su nombramiento como jefe del ISIS-K describía a Ghafari como un líder militar experimentado y uno de sus "leones urbanos" en Kabul. Ha estado involucrado en operaciones guerrilleras y en la planificación de ataques suicidas y complejos.
Hoy Ghafari es responsable de aprobar todas las operaciones de ISIS-K y de organizar la financiación para llevarlas a cabo. El programa de Recompensas por la Justicia de EEUU ofrece 10 millones de dólares (algo más de nueve millones de euros) por información que conduzca a su identificación o localización.
A un paso de morir en 2023
En 2021, Ghafari dirigió el atentado contra el aeropuerto de Kabul. En respuesta, los talibanes apuntaron su nombre en la lista de mayores enemigos y se propusieron su captura. De hecho, la Inteligencia talibán publicó un cartel de búsqueda de tres miembros del ISIS-K que incluía una foto suya.
La ONU considerado a Ghafari "el dirigente más ambicioso del ISIS-K"
En junio de 2023, los talibanes dirigieron una redada contra el ISIS-K en la provincia de Kunar, en el noreste de Afganistán. Fuentes paquistaníes publicaron informes no confirmados según los cuales Ghafari murió en la redada, mientras que fuentes talibanes afirmaron que escapó con heridas graves y huyó a la región paquistaní de Baluchistán.
"Ghafari está considerado el dirigente más ambicioso del ISIS-K", decía un informe de Naciones Unidas en julio de 2023. El documento mostraba la preocupación de los Estados miembros "por la disponibilidad de grandes cantidades de armamento y otros equipos militares" abandonados por las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN.
La ONU señala la posible propagación de estas armas desde los arsenales de Afganistán a los países vecinos. Las tropas extranjeras dirigidas por Washington se retiraron caóticamente tras casi dos décadas de participación en la guerra contra los entonces insurgentes talibanes.
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