El acusado del triple homicidio de Morata de Tajuña mata a su compañero de celda

El acusado del triple homicidio de Morata de Tajuña mata a su compañero de celda
El acusado del triple homicidio de Morata de Tajuña mata a su compañero de celda
El acusado del triple homicidio de Morata de Tajuña mata a su compañero de celda
El acusado del triple homicidio de Morata de Tajuña mata a su compañero de celda.

Los sucesos en torno al triple crimen de Morata de Tajuña no cesan. El autor confeso del homicidio de los tres hermanos, Dilawar Hussein F.C., encarcelado provisionalmente en la prisión de Estremera (Madrid 7), ha acabado presuntamente con la vida de su compañero de celda, Ángel A.V, nacido en julio de 1983 en Bulgaria, y que llevaba encarcelado desde 2012 por homicidio. 

Según ha relatado Instituciones Penitenciarias a 20minutos, los hechos se produjeron en torno a las 2.30 de la madrugada de este jueves, pero según fuentes sindicales, los hechos podrían haber sucedido antes, entorno a la medianoche. El recluso podría no haber comunicado a los funcionarios el asesinato hasta pasadas unas horas desde el crimen. En el momento de la llamada, los trabajadores del centro penitenciario avisaron al juez de guardia, al médico forense y a los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil, que abrieron diligencias.

Al parecer, el conocido como 'El Negro de Morata' se encontraba en el módulo 12 de la prisión, considerado para presos peligrosos, pero compartía celda con otro interno, al que habría matado a golpes en la cabeza con algún tipo de artilugio o una mancuerna de elaboración propia no detectado. Este tipo de objetos están prohibidos en las celdas y solo se encuentran en el gimnasio de la prisión.

Después, Dilawar llamó a través del interfono y confesó lo ocurrido. Los funcionarios del módulo no habían observado ningún problema ni incidente durante esa noche, en la que las puertas se cerraron tras la cena con normalidad. Tras este nuevo crimen, le trasladaron a una celda de aislamiento.

Con respecto al compañero, pese a que en un primer momento se aseguraba que era su 'preso sombra' (un individuo que "orienta, escucha y observa" a los nuevos presos), horas después se ha negado este hecho. Desde Instituciones Penitenciarias, por su parte, han explicado a este periódico que estar en un módulo de conflictivos no excluye que los internos puedan tener acompañamiento

Alguna bronca

Ahora, la Policía Judicial de la Guardia Civil trata de averiguar si ambos internos tenían rencillas previas, aunque sí se sabe que Dilawar ya había participado en alguna bronca. También hablarán con otro reos para averiguar cómo se hizo con el arma del crimen. El Grupo Homicidios de la Comandancia de Tres Cantos se ha hecho cargo de la investigación.

Dilawar, de nacionalidad pakistaní y 42 años, se entregó a la Policía el pasado 22 de enero, cuando confesó haber acabado con la vida de Ángeles, Amelia y Pepe, muy conocidos en Morata de Tajuña. Unos días antes, se habían encontrado sus cadáveres en la vivienda familiar, concretamente en el patio, donde habían apilados y quemados. 

El magistrado tomó la decisión de enviarle a prisión provisional dos días después ante el riesgo de fuga y la posible alteración y/o destrucción de pruebas.

El ya encarcelado había acabado con la vida de los tres hermanos el 17 de diciembre con una barra de hierro, es decir, un mes y un día antes de que sus cuerpos fueran encontrados con quemaduras y en proceso de descomposición. 

La estafa del amor

El asesinato conmocionó a todo el país después de que se conociera que las hermanas de Morata debían dinero al autor confeso por haber sido engañadas en una estafa del amor. Dos hombres, haciéndose pasar por soldados americanos, llevaban unos cinco años pidiendo dinero a Ángeles y Amelia, que se habían endeudado para poder satisfacer sus peticiones. Pese a que amigos y familiares les habían avisado de que todo era mentira, ellas no querían creer. 

Dilawar había prestado unos 60.000 euros a las víctimas, lo que había producido que su vida se derrumbara, ya que las mujeres no le devolvían el dinero. Al parecer y según contaron los vecinos del autor confeso a 20minutos en Arganda del Rey, el hombre lo había perdido todo, su mujer, su casa y su negocio, por haber ayudado a Ángeles y Amelia. 

A finales de 2022, el pakistaní, que regentaba un locutorio en Arganda, se había mudado a casa de las hermanas como pago por su deuda. Poco después, a principios del años pasado, Dilawar había agredido a las hermanas a martillazos, algo por lo que había sido condenado a 2 años cárcel  y una orden de alejamiento. Tres meses después de quedar en libertad, acudió a la casa de Morata donde acabó con la vida de los tres. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento