El año 2024 llega a Andalucía con una larga lista de deberes para el Gobierno de Juanma Moreno, con el impulso de políticas que serán fundamentales para la comunidad, sobre todo las que tienen que ver con la sequía, uno de los principales problemas que amenazan la región, y con la sanidad, que se está convirtiendo en el talón de Aquiles del Ejecutivo.
Y todo ello en un contexto que seguirá estando marcado por la política nacional y en el que Andalucía "dará la batalla donde haga falta" para evitar "privilegios" a favor de otras comunidades, en el marco de los acuerdos que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, alcanzó a finales de 2023 con los partidos independentistas para ser investido. En esta línea, el Ejecutivo andaluz seguirá reclamando la reforma del sistema de financiación autonómica, caduco desde 2014, así como la creación de un fondo de compensación transitorio hasta que ese cambio se haga efectivo, y que tendría que reportar a Andalucía, según los cálculos de la Consejería de Hacienda, unos mil millones de euros anuales.
"Dividir a la gente es el camino más corto para acabar con el progreso y el bienestar", afirmó en su mensaje de Navidad Moreno, que apuesta para este 2024 por un "modelo de estabilidad y de tranquilidad política". Es como el presidente y todo su Gobierno definen la "vía andaluza", un concepto que el líder popular acuñó durante el último 4 de diciembre, Día de la Bandera, y que se ha convertido en el mantra de San Telmo: "Quiero que Andalucía se un ejemplo a seguir, alejada del ruido, del escándalo y del insulto".
Todos los retos y tareas pendientes para este ejercicio los afrontará el Gobierno andaluz con la "estabilidad" de un nuevo Presupuesto ya en vigor, que fue aprobado de manera definitiva en tiempo y forma el pasado 21 de diciembre en virtud de la mayoría absoluta que ostenta el PP-A, aunque sin el apoyo de ningún grupo de la oposición.
Sequía
"Andalucía necesita el agua más que nunca y más que nadie". Así de contundente lo ha expresado el presidente, que pone en valor las "más de mil obras hidráulicas" que su Ejecutivo ha puesto en marcha en los últimos cuatro años. Pero no es suficiente. De hecho, según ha vaticinado Moreno, si no llueve en primavera, los 3,5 millones de andaluces que en estos momentos sufren ya restricciones de agua en múltiples municipios de la comunidad, se convertirán en 5 millones en verano, con cortes que llegarán también a las grandes capitales.
Y es que la "alarmante" sequía que asola Andalucía, con los embalses a un 20% o menos de su capacidad, ha hecho perder ya a la región casi un punto de crecimiento en su Producto Interior Bruto (PIB). Por todo ello, la Junta insiste en la necesidad de alcanzar de manera urgente un Pacto de Estado por el Agua, al tiempo que exige al Gobierno central que asuma la construcción de las infraestructuras hidráulicas que son de su competencia.
Sanidad
El Gobierno andaluz acabó 2023 con algunas turbulencias en la Consejería de Salud, con la salida del viceconsejero y del gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y la incorporación de un nuevo núcleo duro para afrontar los "problemas" de la sanidad pública. Problemas que el Ejecutivo admite que existen, sobre todo en lo que a las listas de espera y la Atención Primaria se refiere, y que el departamento liderado por Catalina García está abordando desde octubre pasado con un plan de choque contundente, que pasa por los conciertos con la sanidad privada y el incremento de la actividad asistencial por las tardes y los fines de semana.
En todo caso, la Junta insiste en que uno de los principales obstáculos es la falta de médicos, que afecta a todo el país, por lo que reclama al Gobierno central un pacto sanitario estatal y el incremento de las plazas MIR en Andalucía. "Mi compromiso es mejorar la gestión y seguir fortaleciendo la sanidad pública y el resto de las políticas sociales", ha afirmado el presidente, que defiende que "ningún sistema sanitario de España tiene tantos recursos como la sanidad pública de Andalucía, algunos de los mejores hospitales del país y muchos de los mejores profesionales".
El Algarrobico
Tras numerosos años de litigios judiciales, desde que en 2003 se concediera la licencia de obras del hotel a medio construir en el paraje natural de El Algarrobico, en el Cabo de Gata (Almería), parece que la demolición de este edificio podría estar cada vez más cerca. Así al menos se lo ha propuesto el presidente Moreno, que ha apostado por alcanzar con el Gobierno central otro gran acuerdo, siguiendo el "espíritu" de Doñana, para que en este 2024 se derribe el inmueble, "símbolo del urbanismo salvaje de la costa mediterránea", en palabras de Moreno, que considera que "ya va siendo hora de tirar al suelo esa mole de hormigón y devolver ese espacio a los ciudadanos y a la propia naturaleza".
En lo que a Doñana se refiere, tras alcanza la Junta el año pasado un acuerdo con el Gobierno central para el desarrollo sostenible de la Corona Norte, el reto este año es desarrollar ese pacto, que contempla inversiones millonarias por parte de ambas administraciones y ayudas a los agricultores de la zona para que abandonen los cultivos de regadíos. Un plan que la Junta espera tener ya en marcha a lo largo del primer trimestre de año.
Proyectos
Más allá de las políticas que la Junta tendrá que impulsar este año para afrontar los principales retos de la comunidad, 2024 será el año en el que vean la luz algunos proyectos importantes que son competencia del Gobierno autonómico. En el caso de la provincia de Sevilla, se prevé que para finales de año se pueda poner en marcha el nuevo Hospital Cartuja Macarena, cuya segunda fase de obras está pendiente de adjudicar. También tendrán que abordar de manera conjunta la Junta y el Ayuntamiento hispalense la muy esperada ampliación del Museo de Bellas Artes, aunque por el momento ninguna de las dos administraciones ha puesto sobre la mesa ni fecha ni ubicación. Las obras de las primeras estaciones de la línea 3 del metro empezarán este mismo mes, mientras que se espera que para junio estén concluidas las de las Atarazanas.
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