Dimiten el viceconsejero de Salud y el gerente del SAS de la Junta de Andalucía

El hasta ahora viceconsejero de Salud de la Junta de Andalucía, Miguel Ángel Guzmán (2d).
El hasta ahora viceconsejero de Salud de la Junta de Andalucía, Miguel Ángel Guzmán (2d).
JUNTA
El hasta ahora viceconsejero de Salud de la Junta de Andalucía, Miguel Ángel Guzmán (2d).

La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía va a despedir el año con cambios muy relevantes en su organigrama, toda vez que los dos cargos más importantes después del de la consejera, Catalina García, han presentado su dimisión "por motivos personales".

Se trata del viceconsejero, Miguel Ángel Guzmán, que será sustituido, según ha informado la Junta, por María Luisa del Moral, médico y actual portavoz de Sanidad del PP en el Congreso de los Diputados. Y del gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), Diego Vargas, al que relevará, apenas un año y medio después de que asumiera el cargo, la actual gerente del Hospital Reina Sofía de Córdoba, Valle García.

Ambos nombramientos han sido aprobados por el Consejo de Gobierno en la reunión celebrada este miércoles. El portavoz de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, ha asegurado que la marcha de Guzmán y Vargas y los nuevos nombramientos serán "revulsivos para los retos que tiene que afrontar la sanidad pública" andaluza. Y ponen de manifiesto, ha admitido, que el Gobierno autonómico es "consciente de los problemas" que hay actualmente en la sanidad. 

En este sentido, el portavoz ha insistido en que "no se ha echado a nadie de la Consejería" y que, "fruto de un análisis" de la situación, los dos ex altos cargos han decidido "dar un paso al lado en un gesto de generosidad" para "dar un nuevo impulso" al departamento de García, que, por otro lado, "cuenta con la confianza del Consejo de Gobierno". La "finalidad de los cambios", ha concluido, es "sumar en positivo"

Asimismo, Fernández-Pacheco ha querido "agradecer" el trabajo realizado por los dos altos cargos que han dejado el Ejecutivo y ha asegurado que los criterios para elegir a sus sustitutas han sido "únicamente el talento y la capacidad". 

Estas dimisiones se producen en plena polémica por el incremento de las listas de espera sanitarias en la comunidad, donde más de un millón de andaluces aguardan para pasar por el quirófano (203.000 pacientes) y para la primera consulta con el especialista (841.000).

El Gobierno de Juanma Moreno ya ha anunciado un plan de choque para reducir estas listas, que pasa tanto por los conciertos con la sanidad privada como por reforzar la actividad asistencial por las tardes y los fines de semana. Además, la Consejería insiste en la necesidad de que el Gobierno central incremente las plazas MIR para paliar el déficit de facultativos, un problema, defiende la Junta, que afecta a todo el sistema sanitario público español.

Por su parte, el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha vinculado la marcha de Guzmán y Vargas a la "gestión desastrosa" de la sanidad pública por parte del Ejecutivo andaluz. Y ha afirmado que las dimisiones "demuestran claramente lo que desgraciadamente llevamos año y medio denunciando desde el Grupo Parlamentario Socialista" en la Cámara andaluza y también "en el conjunto de Andalucía, prácticamente en las ocho provincias a través de plataformas ciudadanas, de pacientes, de alcaldes que se suman a las reivindicaciones y quejas de sus vecinos en relación con la atención primaria" y "con el crecimiento de las listas de espera" tanto quirúrgicas como para especialistas. 

Mientras, el portavoz de Vox en el Parlamento, Manuel Gavira, ha reclamado una comparecencia del presidente de la Junta en la Cámara andaluza para explicar estas dimisiones. "Estamos hablando de su incompetencia y de su mala gestión en la competencia principal que tiene el Gobierno autonómico, que es la atención sanitaria que reciben los andaluces", ha dicho Gavira, quien ha añadido que el SAS "ni funciona bien y esas listas millonarias no son todas heredadas, que es la explicación o la excusa que él va a dar ahora".

También se han pronunciado los sindicatos UGT-A, CSIF y Satse, que consideran que son dimisiones "forzadas" que "para nada van a solucionar el caos que se vive" en el SAS, al tiempo que consideran que la debería marcharse es la propia consejera. En todo caso, confían en que estas salidas vengan acompañadas de un "cambio de política y de nuevas medidas que permitan avanzar". 

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