La Junta ha actualizado las listas de espera sanitarias de Andalucía, correspondientes a junio de este año, que reflejan un importante incremento de los pacientes que esperan para ser intervenidos, mientras que han disminuido los usuarios del Servicio Andaluz de Salud (SAS) que aguardan la primera consulta con el especialista. Salud apunta a la herencia que le dejó el PSOE, a la falta de médicos y al incremento de derivaciones desde Atención Primaria. Y apuesta por los conciertos a partir de 2024, "que no suponen privatizar la sanidad pública", y por aumentar de forma voluntaria la jornada de los profesionales para reducir estas listas.
El dato más positivo es el de las primeras consultas con el especialista, cuya lista de espera la conforman 841.731 pacientes, según los datos consultados por este medio, que suponen un 7,1% menos que los que había hace un año, con una espera media de 121 días. Sí ha crecido, aunque levemente, el número de usuarios que llevan más de 60 días aguardando, que se sitúa en 430.136, solo un 0,3% más que en junio de 2022.
Por el contrario, las listas de espera quirúrgica sí se han disparado en los últimos doce meses. Así, en Andalucía había el pasado junio 203.375 pacientes esperando a pasar por el quirófano, lo que supone un 35,5% más que los 150.034 de junio de 2022. Estos, además, esperan una media de 144 días, frente a los 118 días de hace un año. De todos ellos, 134.749 están esperando una operación contemplada en la ley de garantía de plazos (90, 120 o 180 días máximo, según la intervención). Sin embargo, hay 45.331 pacientes que ya se encuentran fuera de ese plazo o que llevan aguardando más de un año, y que representan un 174% más que los que estaban en esta misma situación en junio del año pasado.
La propia Consejería de Salud admite que las cifras son más elevadas que las que publica el Ministerio de Sanidad, pero porque este solo incluye a los pacientes en espera estructural, mientras que la Junta suma a los transitoriamente no programables (los que no pueden ser operados por alguna causa médica o personal) y a los que están en espera tras rechazar un centro alternativo.
La herencia del PSOE
Esta transparencia, defiende la Junta, contrasta con el 60% de pacientes en lista de espera que los anteriores gobiernos socialistas "no declararon", y que se traducen en 540.833 personas, de forma que las listas que publicaba el PSOE "no eran reales". Tal es así, explican fuentes de Salud a 20 minutos, que los datos del Ministerio entre junio y diciembre de 2018 reflejaron que la lista de espera quirúrgica se duplicó (de 65.615 a 143.887) y la de consultas se triplicó (de 222.962 a 685.523).
A esos pacientes "ocultos" se sumó también, mantienen las mismas fuentes, una "deuda millonaria" que el PSOE dejó al PP de Juanma Moreno con la sanidad privada, y que obliga a que "hoy estemos pagando casi 150 millones de euros más por la mala gestión sanitaria" de entonces.
Salud alega además otros factores que están influyendo en ese incremento de las listas de espera, como la falta de profesionales sanitarios, con un "desequilibrio" entre los que se jubilan y los que se incorporan. De hecho, el SAS calcula que entre 2023 y 2030 se retirarán unos 7.000 facultativos en Andalucía, de forma que no se prevé alcanzar ese equilibrio hasta 2026. Para paliar este problema, la Junta insiste en reclamar al Gobierno central que aumente las plazas MIR.
Igualmente, se está registrando un aumento de las derivaciones de la Atención Primaria a las consultas externas. En este sentido, la consejera del ramo, Catalina García, ha señalado que, en lo que llevamos de año, ha habido 448.000 consultas más, provenientes de 553.000 derivaciones extra. Todo ello ha supuesto un incremento del 15% de las intervenciones. Ello, afirma la consejera, es síntoma de que el sistema "funciona, porque tenemos infraestructuras". El problema, reitera, es que "faltan médicos"..
A todo ello se suma que el sistema, afirma la Junta, "sigue tensionado" tras la pandemia de la covid, toda vez que en los años 2020 y 2021 solo se atendieron los casos urgentes, tanto en Andalucía como en el resto de España, lo que retrasó las intervenciones que eran demorables.
Reducción de las listas
"Los andaluces pueden tener muy claro que no estamos de brazos cruzados". Así de tajantes se muestran desde Salud en cuanto a las medidas que la Junta está adoptando para reducir las listas de espera. "No hay tiempo que perder", añaden.
Así, desde la Consejería apuestan por lo que denominan "autoconcierto", que implica que los profesionales sanitarios, de manera "voluntaria, puntual y retribuida", alarguen su jornada laboral para trabajar también por las tardes y los fines de semana, algo que ya se está llevando a cabo desde el pasado septiembre. No en vano, desde los años 2018 y 2023, las horas trabajadas por los sanitarios se han incrementado un 25,5%.
Salud también tiene previsto recurrir a los conciertos a partir de 2024, a través de una serie de acuerdos marco en los que ya está trabajando. Concretamente, la Junta tiene previsto destinar 734 millones de euros para la concertación de intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas, además de otros acuerdos futuros relacionados con la salud mental y la diálisis.
El Gobierno andaluz insiste en que estos conciertos son "actuaciones muy concretas" a desarrollar cuando "la sanidad pública no sea capaz de dar una respuesta a tiempo", pero en ningún caso suponen "privatizarla". De hecho, Salud recuerda que los antiguos conciertos ordinarios se pudieron en marcha con el PSOE, que en solo tres meses (entre noviembre de 2011 y marzo de 212) llegó a aprobar siete acuerdos de este tipo con la sanidad privada por 485 millones. Además, destaca Salud, el gasto en conciertos sanitarios ha pasado de suponer el 4,19% en 2018 al 4,03% en 2023 y el 3,92% que supondrá en 2024.
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