Un hombre se someterá a juicio en enero acusado de dejar morir a su madre enferma en agosto de 2022 en Sevilla. La Fiscalía reclama para él 17 años de cárcel por un presunto delito de homicidio al considerar que, desde que la mujer tuvo que permanecer encamada, el investigado "desatendió sus necesidades más elementales, dejando de procurarle alimentos, líquidos y cuidados".
En el escrito de acusación, el Ministerio Público habla de homicidio con agravación de especial vulnerabilidad de la víctima. Además, se ha considerado que el investigado no presentaba ninguna alteración psíquica que interfiriera en sus capacidades mentales, siendo "perfectamente capaz de identificar el precario estado de salud que presentaba su madre y el probable desenlace fatal".
La Fiscalía relata en su escrito que la víctima, de 88 años, vivía sola en un piso en la capital hispalense y padecía desde hacía años problemas de salud. El Ministerio Público añade que, desde agosto de 2022, la víctima dejó de levantarse de la cama y llegó a perder "toda movilidad, volviéndose totalmente dependiente". La anciana necesitaba movimientos posturales en la cama que "se omitieron por parte del acusado, provocando que le fueran apareciendo úlceras de decúbito que se fueron profundizando".
La Fiscalía indica que el acusado iba a visitarla prácticamente todos los días y era "consciente" del deterioro físico y psíquico de su madre, pero "desatendió sus necesidades más elementales, dejando de alimentarla, de asearla, de cambiar su posición de la cama, de limpiar su entorno o de llamar a un médico para que la atendieran".
La víctima falleció a consecuencia de un fallo multiorgánico por deshidratación y desnutrición severas y por sobreinfección de úlceras. Tras el fallecimiento, el acusado dio aviso en la tarde del mismo día a Emergencias informando de la muerte de su madre.
Los servicios sanitarios y la Policía pudieron comprobar que el cadáver "presentaba signos de deshidratación, desnutrición y múltiples úlceras con olor fétido". "Había fallecido en condiciones inhumanas, encontrándose la vivienda en lamentables condiciones de salubridad, con insectos, sin limpieza y con un olor nauseabundo", mientras que el cadáver "se hallaba sobre el colchón de la cama, sin sábanas, con una almohada sucia bajo la cabeza y rodeado y cubierto de heces y suciedad", se explica en el escrito del Ministerio Público.
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