La Policía Nacional ha detenido en Melilla a 40 jóvenes de origen marroquí que se hacían pasar por menores no acompañados para poder solicitar asilo en un futuro como mayores de edad.

Según ha informado este miércoles un portavoz de la Jefatura Superior de Policía, los agentes han procedido al descubrimiento e identificación de 64 hombres mayores de edad que se hacían pasar por menores no acompañados con el objetivo de aprovechar las ventajas que ofrece la obtención de la tutela por la Ciudad Autónoma. 

Los detenidos "pretendían poder salir de Melilla, rumbo a la Península, siendo perfectamente conocedores de que sus solicitudes de asilo serían admitidas a trámite debido a la sobrecarga del sistema", declara el portavoz policial.

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A raíz de la operación policial, 40 de ellos han resultado detenidos tanto en Melilla como en Bilbao, Gerona, Zaragoza, Valencia, Almería, Málaga y Algeciras. Los 24 jóvenes restantes están en orden de búsqueda y detención y a todos se les investiga por varios presuntos delitos de falsedad documental.

El portavoz policial ha detallado que la investigación comenzó cuando trabajadores del centro de menores La Purísima detectaron que marroquíes mayores de edad se hallaban inscritos como menores, dando lugar a expedientes de protección del menor que contenían datos falsos acerca de las identidades y edades de los infractores. 

Al ser dados de alta por personal del centro, todos los jóvenes manifestaron tener 17 años sin aportar documento acreditativo alguno, con lo que, desde ese instante, se les generó de forma fraudulenta el correspondiente expediente de protección de menor.

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Una vez formalizaban el ingreso en el centro de menores, los investigados solicitaban protección internacional como asilados, aportando en ese acto sus documentaciones personales donde constaban tanto sus identidades como sus fechas de nacimiento reales, que revelaban que en realidad eran mayores de edad.

Los jóvenes no permitían que se les realizasen las pertinentes pruebas médicas de determinación de la edad, por lo que su mayoría de edad no podía ser conocida hasta que se comprobó en su pasaporte original.

La Policía Nacional ha declarado que, hasta la fecha, ha podido constatar un total de 64 casos y ha admitido que "debido a la complejidad de la investigación en cuanto la documentación requerida y al estudio de los detenidos, la actividad de los investigadores se ha extendido durante más de un año".