Los españoles que no pudieron recoger su voto por correo: "Será la primera vez en mi vida que no voto y estoy muy decepcionado"

Una mujer observa la información sobre el voto por correo este jueves en Menorca.
Una mujer observa la información sobre el voto por correo este jueves en Menorca.
EFE
Una mujer observa la información sobre el voto por correo este jueves en Menorca.

Los minutos pasaban y la hora de tener que salir hacia el aeropuerto se acercaba. El cartero había venido hace dos días y Fátima E., de 25 años, no estaba en casa. Había dejado una autorización por escrito para que sus padres pudieran recoger en su nombre la documentación necesaria para votar por correo, pero el cartero no lo había aceptado dado que debe ser recogida en mano por el votante.

"El cartero se comprometió con que se pasaría a dejar el aviso el miércoles o a más tardar el jueves para que me diera tiempo a ir a recogerlo a la oficina de correos y votar, porque yo me iba el viernes de vacaciones", explica Fátima, que nunca antes había solicitado el voto por correo. Ni el miércoles ni el jueves llegó ningún aviso y Fátima tuvo que marcharse a coger su vuelo a Italia el viernes sin haber podido recoger la documentación y, por tanto, sabiendo que ya no podría votar. La documentación llegó el viernes por la tarde.

"Yo cuando lo pedí pensaba que no habría problema, se supone que iban a reforzar personal e iban a ampliar horarios y eran muchos más días los que iba a estar en Madrid que los que no, así que contaba con recibirlo", declara Fátima. "Me molesta mucho porque ahora mismo es esencial votar y porque ha sido por nada y menos, por los pelos que no lo haya podido recoger".

Correos informó este miércoles de que ya había puesto a disposición de los electores el 100% de las documentaciones electorales remitidas a las personas que solicitaron el voto por correo. Sin embargo, en sus oficinas seguía habiendo 280.378 de estas cartas de electores que no habían sido localizados por los carteros tras haber hecho dos intentos de entrega en mano.

"Me molesta mucho porque ahora mismo es esencial votar y porque ha sido por nada y menos, por los pelos que no lo haya podido recoger"

El procedimiento consiste en que un cartero acude a casa del solicitante y, si no se encuentra disponible, regresa de nuevo otro día. Si en ninguno de esos dos intentos se localiza al votante en casa, se deja un aviso para que acuda él mismo a la oficina de correos a recoger la documentación y, posteriormente, a votar.

Sentimiento de impotencia

Uno de esos sobres con la documentación sin recoger es de Miguel García, un ingeniero informático de 40 años que solicitó el voto por correo de forma telemática el 30 de mayo, primer día que se pudo. Desde que Correos empezó a repartir los sobres, el pasado 3 de julio, García ha esperado teletrabajando en su domicilio viendo como, poco a poco, se acercaba el 12 de julio, día en el que partía junto a su pareja de vacaciones a Cádiz.

"Viendo que pasaba el tiempo, mi idea era llevarme los votos y entregarlos en Cádiz o incluso solicitar que me reenviaran allí la documentación, pero ha llegado en una fecha en la que ya no puedo recogerlos", declara García, que, además, estará finalmente en Madrid el domingo, pero tampoco podrá votar presencialmente por haber solicitado el voto por correo. "No voy a votar, me he quedado sin votar por primera vez en mi vida y estoy muy decepcionado. El problema no ha sido mío, sino el cómo se ha organizado todo. Tal y como lo han hecho parece que no querían que votásemos, no lo entiendo".

"El problema no ha sido mío, sino el cómo se ha organizado todo. Tal y como lo han hecho parece que no querían que votásemos"

Lara, pidió el voto el 27 de junio, pero el 10 de julio aún no había recibido nada. "Fui de nuevo a la oficina de Correos, allí miraron en el ordenador y me dijeron que mi voto estaba aprobado, pero que aún no les había llegado a ellos así que aún tardaría unos días en llegarme pero que tenían hasta el 20 de julio, cosa que me pareció super tarde", explica esta madrileña, que vive en el barrio de Salamanca. "Como me iba ya fuera de España, se acabó mi oportunidad de votar por correo y engrosaré la estadística de los que hemos pedido el voto y no hemos votado al final".

Eugenia, una abogada de 24 años de Madrid, solicitó el voto por correo incluso antes, el 24 de junio, dos semanas antes de tener que volar a Reino Unido para realizar un curso de verano, pero la notificación llegó a su buzón el 12 de julio, cuando ya se había marchado.

"Entiendo que Correos ha debido de tener una carga muy elevada, pero, pudiendo haber previsto la demanda de solicitudes de votos por correo por la fecha en la que se celebrarán las elecciones, me parece esencial destinar más recursos para poder garantizar que todos los que quieran, en efecto, puedan votar", declara Eugenia, que asegura tener un sentimiento de impotencia y se lamenta de que no exista “la posibilidad de autorizar a otra persona para que pueda recoger la documentación".

"Entiendo que Correos ha debido de tener una carga muy elevada, pero me parece esencial destinar más recursos"

¿De quién es la culpa?

En muchos otros casos, los propios votantes que no han podido recogerlo admiten parte de su responsabilidad ante el desconocimiento de un procedimiento que, en la mayoría de los casos, era la primera vez en la vida que realizaban. Ana es una valenciana de 29 años que vive en Madrid, pero sigue empadronada en su vivienda familiar en la capital levantina. "Baje a Valencia por una operación y dije: ‘Como no sé si estaré aquí el finde de las elecciones y aquí voy a estar tres días, me paso y pido el voto por correo y así me olvido. Si llega después, que lo recoja mi hermana y me lo lleve a Madrid", declara Ana.

Era jueves y la funcionaria de correos le indicó que la documentación llegaría "en uno o dos días", pero esta no llegó hasta el lunes, cuando Ana ya estaba de vuelta en Madrid y, como ya se ha dicho, solo ella podía recogerla, no su hermana. "Sé que ha sido culpa mía porque al final es el no haberme leído bien las bases, en mi caso, no ha sido fallo de Correos", se lamenta Ana. "Es una putada porque he votado toda mi vida y en éstas tan importantes me quedo sin votar y me jode un poco la verdad".

"Sé que ha sido culpa mía porque al final es el no haberme leído bien las bases, en mi caso, no ha sido fallo de Correos"

María -nombre ficticio-, una madrileña de 44 años, tampoco calculó bien lo que podía demorarse el proceso y aportó su dirección en la capital en lugar de la de su segunda vivienda, donde iba a pasar todo el mes de julio desde el día 6, tan solo tres días después de que Correos empezara a enviar la documentación.

"No caí o en ese momento, no lo vi claro de que el envío era a partir del 3 de julio", admite María. "Dije: 'Voy a confiar en que sean rápidos', porque lo solicité muy pronto y pensé que podía entrar en la primera remesa de envíos, pero nada. Podría haberme hecho 800km de ida y vuelta para recogerlo, pero no lo he hecho. Me da mucha rabia porque, sobre todo este año, tenía mucho interés en votar".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento