El mercado inmobiliario ha comenzado a estabilizar sus precios en medio de los avisos del Banco Central Europeo (BCE) de nuevas subidas en los tipos de interés, lo que encarece el acceso a financiación para la compra de pisos. Según el índice mensual publicado este martes por la tasadora inmobiliaria Tinsa, los precios de las viviendas han registrado un leve incremento mensual del 0,3% en mayo respecto a los niveles de abril. Sin embargo, el comportamiento del mercado varía en función de la zona. La costa y los archipiélagos son los territorios donde más han crecido los precios de las casas en el último mes, mientras que en el interior de la península han bajado ligeramente. 

El crecimiento general del 0,3% registrado en el precio de la vivienda en mayo respecto al mes anterior supone el tercer avance mensual consecutivo, tras el retroceso anotado en febrero, y replica la tasa de abril. Según los datos de Tinsa, los pisos son actualmente un 4,8% más caros que en mayo de 2022, una cifra que se aleja de las subidas interanuales superiores al 7% registradas a lo largo del segundo semestre de 2022. "El precio medio residencial nacional continúa su tendencia a la estabilización ante el encarecimiento de la financiación y la pérdida de poder adquisitivo frente a la inflación, si bien el empleo se mantiene sosteniendo la solvencia de los hogares. En consecuencia, la actividad de compraventas se modera gradualmente, manteniendo niveles superiores a 2019", valora la directora de Estudios de Tinsa, Cristina Arias.

No obstante, el comportamiento por regiones es dispar. A las puertas del verano, las zonas con mayor recepción de turismo son las que mantienen una tendencia al alza más marcada debido al tirón de las segundas residencias, mientras que en las grandes ciudades y áreas metropolitanas la tónica general es la de la moderación de precios. En el interior peninsular ha llegado incluso a registrarse un ligero descenso del 0,2% en el último mes, en comparación a los niveles de abril. 

En concreto, la estadística publicada este martes refleja un crecimiento de entre el 0,1% y el 0,3% en los entornos urbanos, localizándose el mayor incremento en las áreas metropolitanas. Por encima de esos niveles, las viviendas se han encarecido en mayo un 1,4 % Canarias y Baleares y un 0,9 % en la costa mediterránea. "Las islas y, en menor medida, la costa mediterránea experimentan un nuevo impulso en los precios que podría ser reflejo de la compraventa de segunda residencia. Los compradores en este segmento disponen de mayor poder adquisitivo y son menos sensibles a la inflación y al incremento de los costes hipotecarios, ya que a menudo requieren de menor financiación externa para la adquisición de una segunda vivienda", explica Arias.

Los embargos de vivienda habitual caen un 25,3% en el primer trimestre pese a la subida de tipos que sigue encareciendo las hipotecas

En comparación con los niveles de precio de mayo de 2022, la vivienda en los archipiélagos y las zonas de costa son respectivamente un 5,4% y un 4,7% más caras que hace un año, tasas superiores a las registradas en abril. En cambio, en el resto de zonas los precios continúan moderándose, aunque en las áreas metropolitanas el alza se ha situado en mayo en el 6,3% en tasa interanual. Por su parte, los precios en las grandes ciudades han subido un 4,3% con respecto a mayo de 2022, mientras que en el interior peninsular el incremento ha sido del 3,3%, cuando en enero la tasa interanual superaba el 7%.

De este modo, salvo en la costa y los archipiélagos, los precios confirman su moderación en un mercado inmobiliario que se resiente de las subidas de tipos. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en los primeros tres meses del año la compraventa de viviendas ha caído en España un 2% con respecto al año pasado, mientras que la firma de hipotecas se ha reducido un 5,7%, llegando a desplomarse un 16,6% en el mes de marzo. Y es que las condiciones para acceder a una hipoteca han cambiado radicalmente en el último año, como consecuencia de las consecutivas subidas de tipos del BCE para tratar de contener la inflación.