La moción de censura contra el Gobierno de Sánchez que ha presentado Vox este lunes tendrá al economista y exdirigente del PCE Ramón Tamames como candidato y no se votará en el Congreso antes de la semana del 13 de marzo. Los plazos que establece el reglamento de la Cámara Baja fijan ese día como el primero en el que la presidenta Meritxell Batet podría agendar el inicio del debate parlamentario, aunque Batet tiene la potestad para convocar la discusión sobre la moción cualquier día a partir de ese lunes.

¿Cuáles son los siguientes pasos?

A partir de este lunes, el día que se ha registrado la moción, el reglamento fija una senda con varios hitos muy definidos. Si no se forzara el reglamento para aligerar el procedimiento, la Mesa, el órgano de gobierno de la Cámara Baja, deberá calificar el escrito de Vox el martes día 7 de marzo, un primer filtro que no es más que un trámite, ya que Vox supera de sobra el mínimo de 35 diputados que se exige para presentar una moción. Tras admitirse el escrito y nombrar oficialmente a Tamames candidato, la Constitución indica que empezará a contar un plazo de cinco días en el que otros grupos, si así lo desearan, podrían presentar candidatos alternativos. 

¿Hasta cuándo puede Batet convocar la moción?

Una vez transcurrido ese plazo de cinco días, que se cumplirá previsiblemente el 13 de marzo, la presidenta del Congreso no tiene ninguna limitación a la hora de agendar el debate y votación de la moción de censura cuando desee. De hecho, el único límite a nivel de calendario que establece la Constitución se aplicará a Vox, ya que la Carta Magna señala que si la moción fracasara, la formación no podría volver a presentar otra durante este periodo de sesiones, que termina en junio.

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¿Cómo puede ser Tamames candidato sin ser diputado?

Reglamentariamente, el candidato propuesto para la moción de censura no tiene por qué ser diputado. Eso ya ocurrió, por ejemplo, en 1987, cuando el entonces líder de Alianza Popular, Antonio Hernández Mancha, fue candidato sin tener escaño en el Congreso. Y volvió a pasar en 2018, cuando Pedro Sánchez llegó a la Moncloa a lomos de la única moción de censura exitosa de la democracia sin ser diputado, ya que había abandonado su acta en 2016 tras haber sido apartado de la Secretaría General del PSOE.

Carlos Gámez

¿Cuál será el papel de Tamames en el debate?

Como candidato, al exdirigente del PCE le corresponderá el segundo turno de intervención, después del que tendrá Vox como grupo proponente de la moción de censura. Tamames no tendrá límite de tiempo para desgranar su discurso, en el que deberá "exponer el programa político del Gobierno que pretende formar", según el reglamento del Congreso. Y, además, podrá responder a los grupos parlamentarios que le repliquen, que tendrán un primer turno de 30 minutos y otro segundo de 10 minutos.

El Ejecutivo también tiene la potestad de intervenir cuando considere oportuno en cualquier momento del debate. Sumadas todas esas intervenciones, vistos los precedentes y salvo sorpresa, el debate probablemente se extienda durante dos días.

¿Y Vox?

Vox, como grupo impulsor de la moción, tendrá el privilegio de iniciar el debate para defender su iniciativa, pese a que ninguno de sus parlamentarios será el candidato. El reglamento únicamente establece que quien intervenga deberá ser uno de los diputados firmantes de la moción. Lo hará el presidente de Vox, Santiago Abascal, que al igual de Tamames no tendrá límite de tiempo para realizar su intervención desde la tribuna.

¿Qué mayoría hace falta?

Para que una moción de censura salga adelante, debe alcanzar el apoyo de la mayoría absoluta del Congreso, es decir, al menos 176 escaños. La cifra parece imposible de alcanzar por parte de Tamames, que únicamente tiene asegurados los votos de los 52 diputados de Vox en el Congreso. El PP, por su parte, ha transmitido que no se opondrá a la moción, aunque tampoco la apoyará, lo cual únicamente le deja la opción de abstenerse. La anterior moción de censura presentada por Vox en octubre de 2020 y con Abascal como candidato ya concitó el mayor rechazo de la democracia, ya que salió derrotada con 52 votos a favor y 298 en contra.