El Pleno extraordinario del Tribunal Constitucional (TC) que estaba previsto que comenzara a las diez de la mañana para estudiar el recurso de amparo del PP contra la votación de las enmiendas por las que se modifica el sistema de elección y llegada al TC de los dos candidatos nominados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha retrasado su inicio tres horas entre tensiones internas y ante el registro de escritos por parte de PSOE y Unidas Podemos pidiendo que no se suspenda la votación. La reunión comenzó finalmente con tres horas de retraso, pasada la una de la tarde con todos sus magistrados en la mesa, de modo que el presidente, Pedro González-Trevijano, y otro vocal han decidido finalmente no apartarse después de que Unidas Podemos pidiera su recusación.

Según fuentes del tribunal de garantías consultadas por 20minutos, el retraso se debió, por un lado, a que el bloque conservador -que actualmente es mayoría, con seis magistrados- celebró a primera hora de la mañana una reunión para fijar posición interna que ha durado casi dos horas, lo que ha propiciado que los cinco magistrados progresistas regresaran a sus respectivos despachos a la espera de ser llamados.

Además, las mismas fuentes señalan que los magistrados progresistas planteado la necesidad de que el Pleno se retrasase unas horas para que sus letrados pudieran estudiar a fondo el recurso de amparo del PP antes de discutir y votar sobre su admisión y las medidas cautelarísimas que reclama.

A ello hay que añadir una tercera variable, y es que en las últimas horas los grupos parlamentarios de PSOE y Unidas Podemos han solicitado al TC que les tenga por personados y rechace suspender la tramitación parlamentaria, advirtiendo de que, en caso contrario, se afectará a los derechos de los diputados y de los ciudadanos que representan. También ha sido registrado un recurso de amparo de Vox similar al del PP.

Unidas Podemos ha ido un paso más allá pidiendo apartar al presidente del TC, Pedro González-Trevijano, y al magistrado Antonio Narváez, de la deliberación del recurso del PP al considerar que tienen un conflicto de interés porque, de aprobarse dicha reforma, serían sustituidos por los nuevos magistrados nombrados por el Gobierno. 

Si se hubiesen apartado desde el inicio, las mayorías durante el Pleno que ya ha comenzado se habrían invertido y habría más magistrados progresistas que conservadores en la reunión. Pero desde el TC han informado que en el Pleno hay 11 magistrados -debían ser 12, pero la plaza de Alfredo Montoya está vacante desde que causó baja definitiva por enfermedad hace unos meses-.

Todas estas nuevas variables han hecho que los magistrados y letrados del TC hayan tenido que poner orden en la cantidad de asuntos que deberán abordar durante el Pleno de este jueves.

Situación inédita

Es la primera vez que el Constitucional celebra un Pleno extraordinario de este tipo para resolver si suspende o no una tramitación parlamentaria de una proposición de ley en el Congreso de los Diputados. De admitir las medidas cautelarísimas reclamadas por el PP, se trataría de un hecho sin precedentes en los 40 años de historia del tribunal.

El recurso del PP que ha dado inicio a todo se dirige contra el acuerdo de la Mesa de la Comisión de Justicia adoptado el pasado lunes, por el que se admitieron -entre otras- las enmiendas parciales número 61 y 62 planteadas por el PSOE y Unidas Podemos en el marco de la proposición de ley por la que se deroga el delito de sedición.

En dichas enmiendas, el PSOE y Unidas Podemos proponen pasar de una mayoría de tres quintos -que ahora requiere al menos 11 votos- a una simple para que el CGPJ designe a sus dos candidatos al TC y que, en caso de que el órgano de gobierno de los jueces siga incumpliendo su obligación de enviar dos aspirantes al Constitucional, se puedan exigir a sus vocales responsabilidades penales.

También contemplan que, en lugar de que cada uno de los 18 vocales proponga y vote a dos candidatos, proponga y vote solo a uno, lo que garantizará que los dos más votados sean los aspirantes elegidos por cada bloque del Consejo (el progresista y el conservador).

En su recurso, el PP también señala el acuerdo adoptado el pasado martes por el presidente de la Comisión de Justicia, Felipe Sicilia, por el que decidió no convocar a la Mesa de dicha comisión para resolver la reconsideración que instaron los populares frente al acuerdo de admisión a trámite de ambas enmiendas.

Además de solicitar que se anulen los dos acuerdos, el PP pide como medida cautelarísima que se suspenda la admisión a trámite de las dos enmiendas, independientemente del momento en el que se encuentre la iniciativa legislativa.

Este jueves está previsto que el Congreso de los Diputados celebre un Pleno donde se espera que quede aprobada la proposición de ley -con sus enmiendas-, de modo que el próximo 22 de diciembre el Senado haga lo propio para que pueda entrar en vigor. La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, ha urgido al TC a pronunciarse antes del debate parlamentario de este jueves.