El Gobierno tomará medidas para paliar los efectos económicos de la guerra en Ucrania, pero lo hará dentro de dos semanas, el próximo 29 de marzo. El presidente Pedro Sánchez lo ha justificado porque, según ha asegurado, quiere buscar lo que ha calificado como un "acuerdo de país" con los partidos políticos, las comunidades autónomas y los agentes sociales.

Así ha defendido Sánchez la dilación en la aprobación de una nueva bajada de los tributos que consiga rebajar los precios de la gasolina, el gas o la electricidad. Además, el jefe del Ejecutivo ha recordado que ya se tomaron medidas en el ámbito energético, refiriéndose a las bajadas de impuestos activadas el pasado otoño y que seguirán vigentes hasta la próxima primavera. Las ha cifrado en un ahorro de 10.000 millones de euros en caso de que se amplíen hasta final de año, algo que no se descarta.

El PP reprocha al Gobierno el "océano de propuestas" y la inconcreción en la bajada del gas, la luz y la gasolina

De esta forma, el Gobierno gana tiempo para aplicar unas medidas que se pactaron el pasado fin de semana. En la Conferencia de Presidentes, Sánchez y las comunidades autónomas aprobaron una declaración conjunta insólita en la que se comprometían a "intensificar" las rebajas fiscales. No concretaron entonces ni qué impuestos ni cuánto ni en qué plazos, unos interrogantes que a día de hoy continúan, pues tampoco los ha despejado el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, que -junto a las tres vicepresidentas (Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera)- se ha reunido este miércoles con el PP, Ciudadanos, ERC y PNV. “Es evidente que tenemos que hablar con los sectores, con los partidos, con los agentes sociales…”, ha añadido el presidente, cuyo Ejecutivo también se reunirá con las autonomías.

Sánchez también ha justificado el retraso de dos semanas en la aprobación del plan nacional en la celebración del Consejo Europeo que tendrá lugar los próximos 24 y 25 de marzo. En esa reunión, Bruselas debatirá sobre la propuesta española de desacoplar el gas del precio de la energía, lo que abarataría la factura. 

Sin embargo, deberá contar con el consenso de los Estados miembros, de ahí la gira europea que comienza esta tarde en Eslovaquia y que le llevará a Rumanía, Italia -donde asistirán también Portugal y Grecia-, Alemania e Irlanda. Y es que, según ha asegurado el presidente, “podemos bajar impuestos, pero si no actuamos sobre el origen, que es el funcionamiento disfuncional del mercado energético, poco margen tenemos los Estados”.

Una rebaja de impuestos que puede alcanzar los 10.000 millones

Con todo, el presidente ha defendido que ya se han tomado medidas en el ámbito de rebajas impositivas para abaratar el precio de la luz. Fue el pasado otoño cuando el Ejecutivo aprobó la rebaja del IVA al 10% hasta el 30 de abril (antes era del 21%), que el impuesto de la electricidad se situase en el 0,5% (inicialmente era del 5,1%) hasta esa misma fecha y que el impuesto a la producción eléctrica, que era del 7%, se suspendiera hasta el 31 de marzo. “Estamos ya tomando medidas”, ha defendido Sánchez, que ha declarado que en caso de que éstas se amplíen hasta final de año costará a las arcas públicas entre 10.000 y 12.000 millones de euros.