Asegurar las bajas por maternidad o paternidad, garantizar una educación infantil hasta los 3 años, seguir reforzando el sistema de protección y prevención de la violencia de género o fijar las pensiones por viudedad. Son solo algunos de los objetivos en los que se basa el Plan Estratégico de Igualdad aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 8 de marzo, y que contará con un presupuesto de más de 20.000 millones de euros a desplegar en los próximos cuatro años (de 2022 a 2025).

Concretamente, el plan coordinado por el Ministerio de Igualdad estará dotado de 20.319 millones, de los que beberán prácticamente todos los ministerios del Gobierno para desplegar una serie de políticas públicas que garanticen la igualdad entre hombres y mujeres en todos los ámbitos de la vida. Serán, de hecho, los ministerios de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, y de Trabajo y Economía Social los que reciban un mayor pellizco: 11.800 millones y 3.800 millones, respectivamente. Esto es, más del 75% del total.

Le seguirá Igualdad, al que se le distribuirán 1.900 millones de euros, el de Educación (958 millones) y Derechos Sociales y Agenda 2030 (790 millones). Aunque con una cantidad menor, el resto de departamentos también recibirá una partida presupuestaria para llevar a cabo las medidas que le atañan según el ámbito de acción. 

El Gobierno ejecuta así una inversión "histórica" que viene a duplicar a la del impulsado por Mariano Rajoy en 2016 (de 3.126 millones) para tratar de erradicar cualquier desigualdad en el ámbito familiar, laboral o personal y seguir avanzando hacia la meta de la equidad. 

Un Plan para todos los ministerios y con un plazo de cuatro años

Ayuso pide "suspender" los impuestos de la energía y destinar los 20.000 millones de Igualdad a "ayudar" a familias

Lo cierto es que esos fondos -procedentes de los europeos- han sido objeto de polémica por algunas voces políticas que han expresado su desacuerdo con una estrategia que consideran exagerada e innecesaria en un contexto de inflación, subida de la energía y conflicto en el este de Europa. Una de ellas fue la de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien este domingo instó a "prescindir" de estos 20.000 millones y destinarlos "a ayudar a las familias a afrontar la subida de precios". 

El error del discurso del que posteriormente se hicieron eco otros líderes de la derecha reside en que afearon que ese dinero fuera destinado al "Ministerio de [Irene] Montero" cuando la realidad es que se trata de un plan transversal que reparte los fondos entre todos los ministerios. Además, no se pueden equiparar partidas presupuestarias de un año que reciben ministerios como el de Defensa con este Plan que tiene un plazo de cuatro años. 

Cuatro ejes para fortalecer y garantizar una serie de derechos

Así, derechos como el permiso de paternidad o maternidad, las pensiones, la lucha contra la violencia machista o el subsidio de cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad grave dependerán de este III Plan Estratégico para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres (PEIEMH).

Más detalladamente, los cuatro grandes ejes de intervención que vertebran el Plan son: "Buen Gobierno"; "Economía para la vida y reparto justo de la riqueza"; "Hacia la garantía de vidas libres de violencia machista contra las mujeres"; y "Un país con derechos efectivos para las mujeres".  Así, se concretan 20 líneas de trabajo, 59 objetivos específicos, 141 objetivos operativos y, en total, 676 medidas.

El 90% contra la pobreza y para la conciliación

De esos cuatro ejes, el segundo será el que reciba gran parte del presupuesto (90,9% del total), con 18.461 millones de euros, que se destinarán a luchar contra la "feminización de la pobreza y la precariedad" y a facilitar una transición hacia una economía "que priorice los cuidados". 

Así, se incluyen aquí las prestaciones para progenitores por nacimiento y cuidado de menores, que alcanzan los 8.478 millones de euros; las de riesgo durante embarazo (968 millones), las ayudas por cuidado de hijos con cáncer (474 millones); la universalización del acceso a la educación infantil de 0 a 3 años o el refuerzo del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD). También se contemplan otras medidas, como la pensión por viudedad, la profesionalización de los cuidados con certificados y reconocimientos, o el Plan Corresponsables, que involucra al propio Estado en la conciliación.

972 millones para erradicar la violencia machista 

Para el eje que pretende erradicar las violencias machistas se destinará el 4,8% del presupuesto total, esto es, 972 millones de euros. De ellos, 919 millones irán a detección, atención integral, protección y reparación de las víctimas de violencia machista. La cifra restante se canalizará en estudios, investigaciones para conocer la magnitud de la violencia de género en España, y en el desarrollo e impulso de las iniciativas y leyes que se hayan elaborado para erradicar todos los tipos de violencias contra las mujeres (como la llamada ley del 'solo sí es sí', la que se registrará contra la trata, o la reforma de la ley del aborto). 

El 4,1% en reducir la discriminación

"Asegurar a todas las mujeres el ejercicio efectivo de sus derechos, removiendo las desigualdades de género, en interacción con otros vectores de discriminación, en todos los ámbitos de la vida". Ese es el objetivo que, según el Plan de Igualdad, debe seguir el cuarto eje de la estrategia. De este modo, este bloque, que recibirá 826 millones de euros, buscará avanzar hacia la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, identificando y erradicando las discriminaciones existentes en la sociedad y removiendo los obstáculos que se fundamentan en roles y estereotipos de género. Todo ello, teniendo muy en cuenta la participación de las mujeres y del movimiento feminista. 

Habrá aquí, por tanto, un gran peso para el Ministerio de Educación, ya que gran parte de los objetivos es sellar, desde la infancia, una base sólida que fomente las buenas prácticas. Garantizar la educación afectivo-sexual en los currículos educativos; reconocer y destacar las aportaciones de las mujeres invisibilizadas a lo largo de la historia en los libros de texto; o tratar de fomentar la vocación científico-técnica en las niñas y mujeres jóvenes son algunas de las metas. También aquí se incluyen iniciativas como la ley trans o la futura ley contra el racismo; así como medidas concretas para promover la transmisión de una imagen "Igualitaria, plural y no estereotipada" en los medios de comunicación". 

"Buen Gobierno" o cómo posibilitar el desarrollo del Plan

El primer eje ("Buen Gobierno"), es el que recibe una partida menor (59 millones), y define las condiciones necesarias para afrontar todos estos retos desde las administraciones. El pilar fundamental es la coordinación y colaboración interinstitucional, que marcan como clave para poder impulsar las medidas marcadas en el Plan de Igualdad. 

Destaca también la participación ciudadana o la transversalidad de género en todas las políticas públicas, estadísticas y estudios, presupuestos, contratos o subvenciones. Aquí, de hecho, se contempla el impulso de bonificaciones a la contratación para el fomento del empleo, con 3.739 millones de euros; y el fortalecimiento de la formación de todo el funcionariado en materia de igualdad.