España muestra los primeros indicios de que la sexta ola de coronavirus comienza a llegar a su pico máximo. La incidencia acumulada pasa de subir cien puntos al día a únicamente 28 este jueves, situándose en 3.156, lo que indica una ralentización de la ola; como reconoció este miércoles la ministra de Sanidad, Carolina Darias. No obstante, las comunidades autónomas han notificado este jueves 159.161 nuevos casos de COVID-19, la tercera cifra más alta, después del récord de este miércoles, además de haber notificado 112 nuevos fallecidos.

Así mismo, el ritmo de contagios parece mantenerse por encima de los 100.000 casos diarios. En las pasadas dos semanas se ha registrado un total de 1.495.774 positivos, lo que ha provocado una presión en la atención primaria. Para reducir la carga de trabajo de los sanitarios, algunas comunidades están automatizando las altas y bajas a los trabajadores contagiados, evitando que tengan que acudir a los centros de salud varias veces.

En cuanto a los fallecidos, este jueves se han añadido además 112 nuevos muertos. La cifra total de personas con prueba diagnóstica positiva fallecidas desde que el virus llegó a España alcanza ya las 90.620.

Además, pese a que la letalidad del virus ha disminuido considerablemente, el alto número de contagios también ha presionado a los hospitales con camas ocupadas y UCI. Actualmente, hay 17.269 pacientes ingresados por COVID-19 en toda España y 2.227 en UCI y en las últimas 24 horas se han producido 2.428 ingresos y 2.176 altas.

Estos datos supone que la tasa de ocupación de camas ocupadas por coronavirus se sitúe en 13,87 por ciento (0,16 más que el día anterior) y en las UCI en el 23,62 por ciento (0,15 menos que el miércoles).

Mientras tanto, la tasa de positividad se sitúa en el 39,87 por ciento, frente al 38,89 por ciento del miércoles. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que este dato se encuentre por debajo del 5 por ciento para considerar como 'controlada' la propagación del virus.