Andalucía se encuentra inmersa desde el pasado viernes en pleno proceso de entrada en la nueva normalidad, gracias a la mejora de la situación epidemiológica que ha permitido que, por el momento, media comunidad se sitúe en el nivel cero de alerta sanitaria o riesgo bajo, lo que supone retomar la vida casi tal y como la conocíamos antes de la irrupción de la pandemia del coronavirus. Sin embargo, la crisis económica generada como consecuencia de la sanitaria todavía sigue haciendo mella en muchas familias andaluzas, que han tenido que recurrir a las ayudas de los servicios sociales para poder salir adelante en estos meses.

Una de esas ayudas ha sido el programa extraordinario de la Tarjeta Monedero, puesto en marcha por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación y desarrollado a través de Cruz Roja, que en 15 meses de funcionamiento ha llegado a un total de 26.677 familias andaluzas, lo que se traduce en 69.531 personas. En el caso de la provincia de Sevilla, han sido 4.206 familias y 11.415 personas las que se han beneficiado de este recurso.

La tarjeta ha permitido a los usuarios poder adquirir en los comercios de proximidad productos de primera necesidad, es decir, alimentación básica, higiene y limpieza, gracias a una aportación económica mensual. En total, se han realizado 102.753 recargas en Andalucía (16.555 en la provincia de Sevilla), con una cuantía media al mes por beneficiario de 210,09 euros en tres mensualidades. Las ayudas han variado en función del número de personas que conforman una familia, con recargas de 150 euros en el caso de un solo componente; 200 euros para familias de dos o tres personas; y 250 euros para las unidades familiares de cuatro o más componentes. Además, las personas con una discapacidad superior al 33% y aquellas en situación de dependencia reconocida han sido contabilizados como dos miembros.

Esta subvención, destaca la Consejería, ha sido compatible con otras ayudas, en concreto, con el Ingreso Mínimo Vital; la pensión no contributiva; la Renta Mínima de Inserción Social de Andalucía; la ayuda económica familiar de emergencia para otros conceptos distintos a la alimentación, la higiene y la limpieza; y las becas de alimentación del Plan Solidaridad y Garantía Alimentaria.

Perfil medio

Los beneficiarios de la tarjeta han sido familias afectadas por las consecuencias económicas de la pandemia, entre ellas, personas incluidas en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que hayan disminuido ostensiblemente sus ingresos o hayan sido despedidos en este tiempo, andaluces retornados y familias monoparentales con menores a cargo y unifamiliares.

En cuanto al perfil de los usuarios de este programa extraordinario de la Junta, el 76% de los beneficiarios de la tarjeta han sido mujeres, con una edad media de 43 años. Además, explica la Consejería, en el 85% de los casos se ha tratado de personas de nacionalidad española y más de un tercio del total (el 36%) de perceptores han sido solicitantes que hasta ahora nunca habían necesitado recurrir a la ayuda de los servicios sociales.

Por otro lado, este recurso ha llegado hasta 555 municipios andaluces, lo que supone el 71% de toda la comunidad. Igualmente, el proyecto con la colaboración de los servicios sociales comunitarios de los ayuntamientos en 336 localidades de la región.

Igualmente, el programa ha servido para poner en práctica la aplicación informática Registro Andaluz de Prestaciones (RAP) de la Consejería de Igualdad, lo que ha supuesto "una experiencia piloto para compartir datos de las personas con las que se trabaja en un mismo proyecto e intervención social". Y todo ello en el contexto del desarrollo del sistema ‘CoheSSIona’ para la implantación de la Historia Social Única electrónica en Andalucía.

24 millones de presupuesto

El programa de la tarjeta monedero ha contado con una subvención total de 24 millones de euros, ya que los 17 millones iniciales se ampliaron posteriormente en 5,5 y en 1,5 millones más gracias al éxito de la iniciativa. La Consejería del ramo destaca, además, que la Junta ha movilizado más de 100 millones de euros en ayudas desde el inicio de la pandemia, tanto ordinarias como extraordinarias, contra la pobreza y la exclusión social. Un "compromiso" que tiene su continuidad en el Presupuesto de 2021, que cuenta con una partida de 2.259 millones para esta Consejería.