El PSOE y Podemos no se ponen de acuerdo sobre la derogación de la reforma laboral acordada este miércoles con EH Bildu. Los tres grupos parlamentarios acordaron este miércoles llevar a cabo una derogación "íntegra" y urgente para que la formación abertzale se abstuviera en la votación de la prórroga del estado de alarma y permitiera que saliera adelante. Pero desde que el acuerdo vio la luz, las rectificaciones y contradicciones en público no han cesado.
El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, se ha reafirmado este jueves en la rectificación que hizo el PSOE a medianoche, en la que aseguraba que la derogación no sería total sino parcial, incluyendo solo los tres aspectos que ya tenían acordados PSOE y Podemos en su pacto para un gobierno de coalición: la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad, las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo y la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
El ministro ha ido más allá y, pese a aclarar que el acuerdo firmado con EH Bildu no está roto y que se trata solo de una "apreciación conceptual", ha señalado que los tres partidos implicados en la negociación deberán ratificarse en esa apreciación realizada por los socialistas y que elimina completamente el primer punto del documento referente a la reforma "íntegra".
En paralelo a sus palabras, el líder del PSOE y vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias, aseguraba exactamente lo contrario. En una entrevista en Catalunya Radio ha reiterado que la derogación será total, tal y como estaba firmado, y ha hecho una advertencia a su socio de gobierno: "Lo firmado obliga". "Se va a derogar íntegramente la reforma laboral. El pacto de ayer con EH Bildu lleva la firma de los tres portavoces de los grupos parlamentarios, luego cada partido puede decir lo que quiera. Pero los documentos firmados, en el acuerdo entre tres grupos parlamentarios ese es el acuerdo", ha afirmado tajante.
Por sus palabras, no admite la rectificación del PSOE, como tampoco lo hace EH Bildu, cuya portavoz parlamentaria, Mertxe Aizpurua, considera que se trata de un mero "matiz terminológico" que no cambia el fondo de lo acordado. De hecho, valora de forma positiva que se detallen algunas aclaraciones porque eso demuestra, a su juicio, que el asunto "va en serio".
La propia diputada abertzale ha admitido que "no se puede dejar caer la reforma laboral de un día para otro" para proteger a los trabajadores, sobre todo ante la crisis económica que se avecina, pero confía en que se empiece a trabajar cuanto antes en ella.
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