El proyecto de renta mínima que diseña el Gobierno no se ha aprobado aún y ya genera las primeras fricciones. La Vicepresidencia segunda afirmó este jueves que su titular, Pablo Iglesias, había intercambiado documentación con el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, de cara a poner en marcha la propuesta con el beneplácito de todos los agentes económicos. Pero, horas más tarde, la propia CEOE y la otra gran organización de empresarios, Cepyme, aseguraron en un comunicado que "en ningún momento" han negociado nada en relación a la implantación de esta ayuda.

"Ante la posibilidad de que el Gobierno apruebe próximamente un nuevo ingreso mínimo vital, desde CEOE y Cepyme queremos aclarar que, al tiempo que compartimos que ningún ciudadano puede quedar desatendido en esta crisis económica sobrevenida por la pandemia del Covid-19, en ningún momento se nos ha hecho partícipes de la negociación de tal iniciativa, ni se ha sometido a su discusión en el diálogo social", asegura el comunicado. No se niega expresamente que haya habido intercambio de documentos, pero sí que se haya entrado a discutir la medida.

Los empresarios, de hecho, aseguran sentirse manipulados por la información facilitada por la Vicepresidencia segunda. "En estos momentos, ante la manipulación interesada y la deslealtad al diálogo social y a los empresarios españoles, nos sentimos presionados para que demos apoyo a una propuesta de partido, que nada tiene que ver con un acuerdo consensuado en lo que debería ser el cauce habitual con los interlocutores sociales, que formamos parte de la mesa de diálogo y que siempre hemos estado de acuerdo en no dejar a nadie atrás en esta crisis", critican CEOE y Cepyme.

Por ello, las organizaciones empresariales han decidido cancelar la reunión que tenían este viernes prevista con la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que junto a Iglesias y al ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, está diseñando la prestación de la discordia. "En estas condiciones, se hace imposible participar" en el encuentro, argumentan CEOE y Cepyme.

La propuesta que ha generado la polémica no es, como tal, la renta mínima que prepara el Gobierno desde hace semanas y que, dada su complejidad técnica, no estará lista hasta dentro de unos tres meses, sino una ayuda provisional que estará vigente hasta que la prestación definitiva se apruebe. Dicha ayuda provisional estará destinada a las familias con ingresos por debajo de los 500 euros, unos ingresos que el Estado complementará con la cantidad necesaria para que lleguen precisamente a esa cifra.