Las personas sin hogar acogidas en centros especializados aumentaron un 9,5% en 2018, alcanzando las 18.001 personas, de las que 4.566 eran mujeres, según la última encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Los centros que ofrecen servicios de restauración sirvieron de media al día 48.573 servicios, un 10,7% más que dos años antes, en 2016. Sobre la titularidad de los centros, el 24,4% eran públicos, aunque el 82,4% estaba financiado total o predominantemente por la Administración.

Por comunidades y ciudades autónomas, en once se sobrepasó el número de ocupantes en los centros con respecto a 2017: Andalucía (1.936 personas), Canarias (708), Cantabria (154), Castilla y León (996), Extremadura (216), Galicia (1.069), Murcia (1.032), Navarra (385), País Vasco (2.979), La Rioja (128) y Melilla (1.223).

Las prestaciones más frecuentes que ofrecieron los centros, según el INE, fueron: Información y acogida (82,2%), orientación y/o derivación (76,6%) y alojamiento (74,6%).

Por otro lado, las situaciones más frecuentemente atendidas por estos centros fueron sobre inmigración o solicitud de protección internacional (39,5%) y adicción a otras drogas (no sobre alcohol) (19,8%). Las mujeres víctimas de violencia de género llegaron al 15,2% y las personas que cumplieron los 18 años y fueron derivados, el 13,1%.

En relación a los gastos de los centros, el 44,6% tuvo un gasto anual igual o inferior a 100.000 euros durante 2018. Las ciudades autónomas fueron las que mayores gastos medios anuales por centro registraron: Melilla (con 2,8 millones de euros) y Ceuta(2,4 millones). Le siguió la Comunidad de Madrid con 560.183 euros).

Este programa, Housing First, se comenzó a aplicar en España en 2014, y está dirigido principalmente a personas sin hogar "con una situación cronificada y con grave deterioro de sus condiciones físicas o psíquicas", según afirma el INE.

A este programa se destinó un porcentaje más alto de viviendas en 2018 que en años anteriores. En junio del año pasado, se destinaron 301 viviendas, un 128% más que en 2016, que fueron ocupadas por 360 personas, de las que 90 eran mujeres.