Iglesias se lanza a por la España "que han vaciado" con carreteras secundarias "dignas" y conexión universal a internet

Iglesias, en Nalda (La Rioja).
Iglesias, en Nalda (La Rioja).
PODEMOS
Iglesias, en Nalda (La Rioja).

Parada en Nalda, un pueblo riojano de apenas mil habitantes gobernado por el PP, para hablar de la España vaciada. Podemos ha hecho este martes un alto en su gira por el país para posicionarse sobre uno de los temas revelación en la campaña y, probablemente, de los de mayor profundidad: la despoblación de pueblos y localidades medianas.

El candidato morado, Pablo Iglesias, ha sintetizado que esta "España vaciada" que "han vaciado" es "la del futuro" y que, a día de hoy, es "la que más padece los incumplimientos de la Constitución", texto que se ha convertido en eje de su campaña. Así, ha recordado algunas de las propuestas de su programa, tales como mejorar la conexión por ferrocarril más allá de la alta velocidad, garantizar la atención sanitaria a domicilio, la universalización del acceso a internet en una legislatura o que haya "una red de carreteras secundarias adecuada y digna" en lugar de "rescatar autopistas de los amigos del poder".

Unidas Podemos también propone la atención inmediata de la Guardia Civil en un máximo de 15 minutos, blindar por ley el reparto habitual de suministros básicos cuando no sea posible disponer de una tienda de ultramarinos y que haya un cajero automático en un radio de 20 kilómetros financiado a través de un canon al sector bancario.

Pensiones por encima de los 600 euros

En línea con el acto de este lunes en Palma, Iglesias ha recuperado parte de su discurso económico y ha prometido que, si gobierna, limitará los contratos temporales o derogará las dos últimas reformas laborales y ha propuesto que no haya "ninguna pensión" por debajo de los 600 euros. "Es muy poco, pero al menos nos acercaría a cumplir la Constitución", ha abundado.

El líder de la coalición de izquierdas ha estado arropado de los cabezas de lista riojanos. La candidata al Congreso, Edith Pérez Alonso, ha abogado por un mundo rural "vivo" que sea una "solución para el futuro", también ambiental.

"La España rural la quieren reivindicar ahora quienes la han vaciado, aquellos que solo saben de bancos, dinero y cajas fuertes", ha arengado por su parte Diego Mendiola, candidato al Senado. "La gente que vive en los pueblos no tiene que ser rentable, tiene derechos", ha zanjado.

"No nos compra nadie"

Al inicio de su intervención, Iglesias ha replicado a un espontáneo que le ha gritado un "viva España". "Claro que sí", ha afirmado, "pero defender España es defender la escuela pública, los hospitales públicos y el sistema de pensiones. Los mayores traidores a España son los que privatizan, acaban en consejos de administración de las grandes empresas y bajan impuestos a los ricos", ha abroncado, entre aplausos de las varias docenas de asistentes. "Ningún patriotero de charanga y pandereta nos va a dar lecciones de lo que significa ser español (...). Viva España, sus pueblos y sus gentes", ha rematado.

Más allá de esta anécdota, Iglesias ha querido dejar también mensajes de tono más mitinero que propositivo. Ha aprovechado para atacar a las élites al calor de la polémica de las cloacas (otra de sus ideas clave estos días) y ha afirmado que "los propietarios de los medios de comunicación mandan más que los diputados y el gobierno". "Los poderes económicos apuestan por cualquier fórmula para que nosotros no estemos en el Gobierno, porque si estamos, algunos sinvergüenzas van a tener que pagar impuestos", ha vaticinado.

De este modo, Iglesias ha buscado alentar el temor entre sus potenciales votantes a que Pedro Sánchez termine pactando con Ciudadanos si los números dan. "Hemos aprendido algo en estos años. Las cosas se cambian gobernando. Nos han tomado el pelo porque no estábamos en el Gobierno: firman un acuerdo contigo, te dan la razón en muchas cosas y, una vez que tienen tus votos en el Parlamento, no cumplen", ha añadido.

Iglesias ha pedido así el voto en su quinto día de campaña para acceder al gobierno y ha asegurado que el hecho de que "Soraya Sáenz de Santamaría esté trabajando para una firma de abogados que fue ayudada por ella a través de la Abogacía del Estado" significa que "los poderosos tienen conciencia de clase". "Saben que necesitan representantes políticos y se los compran", ha continuado. "Nosotros habremos cometido muchísimos errores, pero hemos demostrado que no nos compra nadie", ha sentenciado.

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