La crisis sanitaria desatada por la pandemia de coronavirus mantiene paralizado el deporte mundial y el tenis no es una excepción. De hecho tanto jugadores como torneos se encuentran en una guerra abierta por la decisión de Roland Garros de reubicarse a finales de septiembre. 

En este sentido Rafa Nadal es uno de los grandes damnificados por varias razones. La primera, que se ha cancelado gran parte de la temporada de tierra, su superficie favorita y en la que defiende el título de Roland Garros.

Además, la nueva fecha del 'Grand Slam' parisino le obligarán a elegir entre ese torneo o el US Open, que se disputa solo unas semanas antes, del 31 de agosto al 13 de septiembre, en pista dura y donde el español también defiende el título de campeón. 

Esto complica las opciones del balear de acabar como número uno del mundo por sexto año consecutivo, ya que debe recuperar 4.000 puntos hasta el final de una temporada que ha quedado trastocada por la suspensión de torneos de tierra como el Conde de Godó. Además, faltan otros que apuntan al aplazamiento o la cancelación como las citas de Madrid o Roma.

Nadal es el jugador que más puntos defiende, por encima de sus grandes rivales por el trono mundial, Novak Djokovic. Roger Federer y Dominic Thiem.