La denuncia por una supuesta agresión sexual en la que una mujer brasileña ha acusado de esta práctica a Cándido Conde-Pumpido Varela, hijo del presidente del Tribunal Constitucional, sigue generando un gran interés en nuestro país.
Así, la presunta víctima aseguró, en exclusiva, a Vamos a ver, que el abogado la había agarrado del cuello y la había "penetrado por la vagina y sin preservativo", pese a que ella había expresado que no quería mantener relaciones sexuales con él. Además, también dos amigos de Conde-Pumpido habrían intentado mantener relaciones con ella.
Pese a esto, la jueza decidió poner en libertad sin medidas cautelares tanto a Cándido como a sus dos amigos. Asimismo, el pasado jueves, se conocía que el abogado había sido ingresado en el área de psiquiatría de un hospital madrileño, al parecer, por un ataque de ansiedad.
Sin embargo, personas cercanas al entorno de Conde-Pumpido aseguraron que su ingreso en el centro sanitario se debía a una "patología psiquiátrica" y que esta no era la primera vez que el abogado acudía al hospital.
Así, tras unos días ingresado, Cándido Conde-Pumpido ha regresado a su vivienda. Lo hacía muy abrigado y sin quitarse el casco de la moto, haciéndose pasar por un repartidor de comida a domicilio para tratar de engañar a los compañeros de prensa que se encontraban apostados en la puerta de la casa: "Soy repartidor de Glovo".
Poco después de acceder a la vivienda, Cándido volvió a salir para apuntar: "No voy a hacer ninguna declaración, solo os pediría que respetaseis la intimidad de mi casa. En el momento que tenga que declarar, yo declararé. Estoy muy tranquilo. Muy, muy tranquilo".
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