Plan de choque del Ayuntamiento de Madrid contra las viviendas de uso turístico (VUT) en la ciudad. Para ordenar este mercado, el Consistorio suspende temporalmente las concesiones de licencias para VUT y tampoco va a autorizar la transformación de local comercial a vivienda de este tipo en distrito Centro. Además, endurece las sanciones a las VUT que no cumplan con la normativa: la primera será de 30.000 euros, la segunda de 60.000 y la tercera de 100.000, pudiendo llegar a acumular 190.000 euros en sanciones.
Se incrementará el número de inspectores un 15%, hasta los 75, para perseguir las viviendas de uso turístico que no sean legales, pudiendo incrementar la cifra si fuera necesario. El Ayuntamiento pone en marcha este plan de acción mientras elabora la modificación del Plan General con el que se ordenará el mercado de las VUT en la capital. La aprobación inicial está prevista para septiembre de 2024 y la definitiva, previsiblemente, será en el primer semestre de 2025.
En Madrid operan 14.699 establecimientos turísticos, de los que el 92% son VUT (13.502) pero solo 941 tienen licencia municipal, es decir, son legales. Para garantizar la seguridad jurídica de los usuarios, el Ayuntamiento publicará en su página web un listado con las VUT que cuentan con licencia y su ubicación. De esta manera, según ha explicado el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, "las personas que quieran alojarse sabrán si están en una VUT legal o ilegal, con las consecuencias que se pueden derivar".
El Consistorio pone en marcha este plan de acción para ordenar las viviendas de uso turístico en la ciudad de Madrid ante "el plan ineficaz" para evitar la proliferación de este tipo de alojamientos. Se refiere al Plan Especial de Regulación del Uso de Servicios Terciarios de Hospedaje aprobado el 27 de marzo de 2019, bajo el mandato de Manuela Carmena. Los objetivos de este nuevo plan son evitar la desertización residencial del distrito Centro, ordenar la oferta turística y "favorecer la convivencia entre residentes y la actividad turística".
Uno de los pilares de este plan de acción del Ayuntamiento es el endurecimiento del régimen sancionador. Asegura Martínez-Almeida que con la actual normativa, la primera sanción son 1.000 euros, la segunda 2.000 y la tercera 3.000 euros. Con su modificación, cuando se verifique que una vivienda se dedica a uso turístico sin licencia, el Consistorio podrá ordenar el cese y restablecimiento de la legalidad que puede ir en paralelo a nuevas sanciones: la primera sanción firme será de 30.000 euros, la segunda de 60.000 euros y la tercera de 100.000. Además, son acumulativas en caso de incumplimiento. Para el alcalde tienen un carácter disuasorio porque "los beneficios no van a estar por encima de la sanción".
Más de 5.500 VUT nuevas en Madrid desde 2017
Desde 2017, las viviendas de uso turístico se han incrementado en la ciudad un 41%, con 5.564 nuevas, y ya hay 13.502 VUT. En el mismo periodo, se han creado tan solo 50 establecimientos turísticos: actualmente hay 320 hoteles, 473 en pensiones y hostales, 130 apartamentos turísticos, 14 hoteles-apartamentos y 260 establecimientos que engloban casas de huéspedes, hostels y albergues. Estos datos suponen que el 65% de las plazas turísticas creadas son viviendas de este tipo.
El Ayuntamiento ha hecho un informe del impacto de las VUT en la ciudad y apunta a cuatro consecuencias: la desertización del centro, problemas de convivencia, afección en el turismo y una reducción del uso de vivienda residencial. El problema principal se encuentra en el distrito Centro: el porcentaje de las VUT sobre el parque de viviendas en el centro de la ciudad es 8,5 veces superior al del resto de la ciudad... En toda la capital representan el 0,89% sobre el parque de viviendas mientras que en Centro alcanzan el 7,63%.
Además, mientras que entre los años 2007 y 2023, la población censada en la ciudad de Madrid se ha incrementado un 4,86%, en 154.943 habitantes más; en el distrito Centro ha descendido en 1.610 personas, un 1,14%. Hay un turista alojado por cada dos residentes, mientras que en la almendra central hay uno por cada 9 residentes. Otro problema que pueden provocar los edificios con VUT son las molestias a los vecinos: el Servicio de Inspección y Disciplina recibió en 2023 un 51% más de denuncias que en 2022 que afectaban a viviendas y apartamentos de uso turístico: 686 frente a 454. El 82% procedían de ciudadanos. Del total de inspecciones realizadas (4.093), se verificó que 478 viviendas se dedicaban a este uso y 243 restablecieron uso residencial.
Para la oposición y los vecinos es insuficiente
La Federación Regional de Vecinos de Madrid (FRAMV) ve "un brindis al sol" el plan de Almeida porque "apenas" se están concediendo en este momentos licencias para viviendas de uso turístico por no tener accesos independientes: la normativa de Carmena obliga a este requisito. Por este motivo, "muchos empresarios y propietarios ni siquiera solicitan al Consistorio licencia de actividad para empezar a operar". Por eso, demandan que la medida se aplique "a todo el municipio y no solo a la almendra central, especialmente ahora, en un momento en el que todos los datos apuntan a una importante expansión del fenómeno a distritos limítrofes como Puente de Vallecas, Carabanchel, Latina, Usera o Ciudad Lineal".
La portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, Rita Maestre, ha cargado contra la "propaganda" del alcalde porque "la congelación no solucionará el problema" que, según Maestre, es que la gran mayoría de los pisos turísticos ya operan sin ninguna licencia. "Esto no se va a solucionar ni diciendo que la culpa es de Carmena ni congelando nuevas licencias, se va a solucionar con voluntad política y con medios de inspección para poder hacer cumplir la normativa municipal", ha defendido Maestre. La formación va a poner en marcha una campaña para ayudar a denunciar a los vecinos que sufren este tipo de pisos.
Para la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, el plan de acción anunciado por el alcalde es un "parche" y "claramente insuficiente para dar solución a este grave problema". “Almeida carece de la ambición necesaria para abordar este problema y quien sigue sufriendo las consecuencias es la vecindad". Insiste en clausurar todas las VUT ilegales.
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