Seis personas han muerto en la madrugada de este martes en el kilómetro 24 de la AP-4 a la altura de Los Palacios, en Sevilla, al saltarse el conductor de un camión un control de la Guardia Civil de Tráfico.

Entre las víctimas, dos agentes del Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil, y otros cinco guardias civiles han resultado heridos, tres de los cuales se encuentran en estado muy grave. Los otros cuatro fallecidos son los ocupantes de los vehículos que se encontraban parados en el control.

¿Cómo ha sucedido?

El suceso tuvo lugar sobre las 4:40 de la madrugada. Al parecer, el camionero habría maniobrado bruscamente después de recibir indicaciones de los agentes, que realizaban un control habitual contra el narcotráfico, lo que provocó que hiciera el conocido como "efecto tijera" y arrollara a varios vehículos que se encontraban en el dispositivo situado en el arcén.

Según ha informado la Guardia Civil, el camión se desvió hacia el arcén y arrolló a los tres primeros vehículos oficiales del instituto armado y a otros tres turismos particulares que se encontraban parados. Las causas del siniestro todavía se desconocen, aunque las primeras hipótesis apuntan a que habría sido de forma accidental.

Una asociación de guardias civiles exige a Marlaska declarar su profesión 'de riesgo' tras la muerte de 2 agentes en el control de Sevilla

El camionero ha sido detenido por las autoridades y ha dado negativo en alcohol y drogas. Por su parte, Tráfico intenta aclarar si el atropello pudo deberse a una distracción o somnolencia del conductor, a quien se le achaca un posible delito de homicidio por imprudencia.

El Grupo de Acción Rápida (GAR): origen y misión

Eneko Lira Gómez, cabo primero, y Juan Jesús López, guardia civil, han sido dos de los fallecidos pertenecientes a la GAR, una unidad policial integrada dentro de la Unidad de Acción Rural (UAR) de la Guardia Civil de España, que tiene como misión principal la lucha contra el terrorismo y la ejecución de operaciones de riesgo o que requieran una respuesta rápida.

Su historia se remonta a los años 70, cuando España vivía bajo la amenaza de la banda armada ETA: 40 guardias civiles de la Comandancia Móvil de Logroño, junto a nutrido grupo de voluntarios, fueron formados para cumplir con la misión de hacer frente al terrorismo imparable que sacudía el país. 

Su andadura comienza en febrero de 1980, a raíz del atentado de Ispáster (Vizcaya), cometido por la organización terrorista ETA contra una patrulla de la Guardia Civil, y que se salda con un resultado de 6 guardias civiles asesinados y dos terroristas muertos. Desde entonces, se desplegó por cada una de las provincias vascas una unidad de la GAR y en 1986 se implantaron dos secciones especiales también en  la Comunidad Foral de Navarra con la misión de cobertura de su línea fronteriza con Francia.

En el año 1991, aunque conserva su misión y cometido, la Unidad pasa a denominarse Grupo Especial de Seguridad (GES), dependiente de la Agrupación Rural de Seguridad (ARS), y no es hasta 1997 cuando se desconecta de ella y retoma su acrónimo GAR. Tras un breve paréntesis de un año, en 1998 se cambia el nombre por el actual Grupo de Acción Rápida (GAR) y pasa a depender, junto con el Centro de Adiestramientos Especiales (CAE), de la Unidad de Acción Rural (UAR).