El cabo primero Eneko Lira y el guardia civil Juan Jesús López, miembros del Grupo de Acción Rápida (GAR), han perdido la vida en la madrugada de este martes en Los Palacios (Sevilla) después de que un camión arrollase accidentalmente el control contra el narcotráfico que habían levantado en la AP-4, un suceso que se ha cobrado también la vida de cuatro civiles, y en el que tres agentes más han resultado heridos graves.
Los dos agentes fallecidos eran compañeros de David Pérez Carracedo, uno de los dos agentes asesinados el pasado mes de febrero en Barbate (Cádiz), cuando fueron arrollados por una narcolancha en pleno operativo policial.
Los miembros del cuerpo fallecidos en los sucesos de Sevilla y Barbate trabajaban en la unidad de élite de la Guardia Civil, el Grupo de Acción Rápida (GAR), creado en los años 70 para luchar contra el terrorismo de ETA y más tarde ampliado para enfrentarse al narcotráfico y colaborar en misiones internacionales.
Eneko Lira (residente en Vitoria y natural de Vizcaya) y Juan Jesús López (El Ejido, Almería) pertenecían al primer Equipo Operativo de Acción Rápida y, dentro de este, al segundo Equipo de Despliegue Rápido (EDR), que tiene su base en Sevilla. David Pérez estaba destinado en los Grupos de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de Algeciras.
Además, uno de los cuatro civiles muertos era vecino del municipio de Barbate. Los otros tres eran de Dos Hermanas (Sevilla), Ceuta y un país extranjero.
Según han señalado fuentes de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) a 20minutos, este tipo de controles contra el narcotráfico son habituales en las carreteras españolas y que este, en concreto, estaba "bien señalizado", por lo que apuntan a un posible despiste del conductor del camión.
La principal hipótesis: causa "accidental"
El conductor del camión que esta madrugada arrolló a vehículos del instituto armado en la autopista AP4 (Sevilla-Cádiz) ha dado negativo en las pruebas de alcohol y drogas, por lo que se descarta el consumo de estas sustancias como detonante del accidente.
La principal hipótesis con la que trabaja la Benemérita es que la causa fue "accidental". Al parecer, el conductor del camión, al recibir señales de los agentes, maniobró "bruscamente" desviándose hacia el arcén, arrollando a los tres primeros vehículos oficiales del GAR y al menos otros dos turismos civiles que estaban dentro del dispositivo.
La Dirección General de Tráfico (DGT), por su parte, apunta a somnolencia u otra distracción como la causa principal.
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