Luz verde a la amnistía en el Congreso de los Diputados. Este jueves la Cámara Baja ha aprobado la proposición de ley para enviarla al Senado, donde se topará con un frenazo de dos meses propiciado por la mayoría absoluta del PP. Después volverá al Congreso y, en torno a finales de mayo, recibirá el plácet definitivo. Durante el pleno extraordinario para la votación, el PSOE ha presumido de "acabar con el tiempo del enfrentamiento y abrir el tiempo de la reconciliación". Sin embargo, tanto Junts como ERC han advertido de que "el conflicto entre la nación catalana y la española sigue existiendo" y han anunciado ya el próximo paso en su hoja de ruta: "el ejercicio del derecho de autodeterminación".
La norma ha salido adelante gracias al 'sí' de 178 diputados: 120 del PSOE, 27 de Sumar, siete de ERC y siete de Junts, seis de Bildu, cinco del PNV, cuatro de Podemos, uno del BNG, y también el de José Luis Ábalos, que hoy se ha sentado por primera vez en la bancada del Grupo Mixto. Mientras Patxi López ha salido a la tribuna para atacar al PP y sacar pecho de las "políticas valientes" del Partido Socialista en favor de la "reconciliación", Junts ha afirmado desde el comienzo de su intervención que la amnistía no se aprueba "por el convencimiento del PSOE", sino "como resultado del acuerdo con Junts".
Josep María Cervera, del partido de Carles Puigdemont, se ha esforzado por lograr que Junts se cuelgue los galones tras la aprobación de una ley que "ahora sí", protege a todos los protagonistas del procés. Así ha justificado el rechazo de su partido a la ley de amnistía el pasado 30 de enero, mientras que ERC se ha mostrado de nuevo convencido de que en aquel pleno la ley ya protegía a todos los independentistas.
Al margen de este asunto, ambas formaciones independentistas han coincidido en denunciar "la represión" del Estado español y lanzar un mensaje difícilmente compaginable con el del PSOE: "Vamos a por el derecho de autodeterminación". "No se cansan de repetir que es una amnistía hecha a medida para los independentistas", ha deslizado Cervera aludiendo al PP; "No se confundan, es una amnistía hecha a medida de la represión de los defensores de la sacrosanta unidad de España".
Así, ha dado por buena la norma que, "tras pasar por el lodazal del Senado", volverá a la Cámara Baja para recibir el aval definitivo. "La amnistía era una condición de posibilidad, pero no suficiente. Seguiremos el camino de la liberación nacional porque es nuestro ADN político", ha afirmado por su parte Pilar Vallugera (ERC), que ha añadido: "No vamos a parar hasta el ejercicio del derecho de autodeterminación".
También en la línea de Junts, la diputada de ERC ha denunciado la "represión" del Estado español. Así, ha defendido que "la reacción del Estado a un hecho que tuvo que ver con la propia práctica de la democracia fue desmedida". Según Vallugera, en el procés "no hubo delito ni golpe de Estado ni malversación ni menos esta locura de terrorismo".
El PSOE presume de "cerrar un ciclo" con la amnistía
El portavoz socialista Patxi López se ha encargado de salir en defensa de la norma desde la tribuna: "Hoy vamos a aprobar la ley de amnistía y vamos a cerrar el ciclo de decisiones políticas con las que nos hemos enfrentado a la situación política que heredamos en Cataluña", ha comenzado Patxi, resumiendo el que sería el mensaje crucial de su intervención. Frente "al enfrentamiento entre los unos y los otros" y "la ausencia de política" de un PP "escondido tras el Código Penal", el socialista ha presumido de una política "valiente".
Frente a "la policía patriótica" o "la disolución de partidos políticos", López ha vendido la labor del Gobierno de Pedro Sánchez: "trabajar para desinflamar los conflictos". "Nosotros no nos sentamos en un sillón a fumar un puro mientras los problemas crecen, no nos escondemos tras el Código Penal, eso lo hicieron ustedes y fracasaron estrepitosamente. Y nosotros nos arremangamos para enmendar su fracaso", ha espetado López al Partido Popular.
Al hilo, ha defendido "los acuerdos entre distintos" por su "valor político real", y ha expuesto la amnistía como una herramienta para la reconciliación. Y para culminar ha invitado a la bancada del Partido Popular a preguntarse si creen que los españoles prefieren la España de 2017 a la de 2024. "El 12 de mayo en Cataluña darán respuesta a esa pregunta y ustedes ni aparecen en las quinielas, mientras nosotros estamos convencidos de que vamos a ganar", ha resuelto el diputado.
El frenazo de la ley en el Senado
Ahora que la ley ha sido aprobada en la Cámara Baja, el siguiente paso es su tramitación en el Senado, que constituirá un frenazo importante. Hace unos meses, el PP aprovechó la mayoría absoluta con la que cuenta en el esta Cámara para reformar su reglamento y permitir que el Senado pueda levantar la declaración de urgencia emitida por el Congreso, que reduce a la mitad los plazos habituales en la tramitación de una proposición de ley. Esa reforma tenía un objetivo claro: dilatar la tramitación de la ley de amnistía. Así, el PP podrá agotar el plazo máximo de dos meses que permite la Constitución para retener allí el texto, lo cual llevará los trámites hasta mediados de mayo.
Pasados los dos meses, el PP con toda probabilidad forzará la vuelta del texto al Congreso de los Diputados mediante la aprobación de un veto que exprese el rechazo frontal de la Cámara Alta a la proposición de ley. El Congreso evaluará la norma de nuevo y podrá levantar el veto. Todo indica que la tercera será la vencida y la amnistía obtendrá el plácet a finales de mayo.
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