Este martes los sindicatos minoritarios han convocado una huelga de tres días en la educación pública madrileña. El objetivo que buscan es que la Comunidad de Madrid mejore las condiciones laborales del cuerpo de docentes, reduciendo el número de horas lectivas, incrementando los salarios, disminuir la burocracia o construyendo nuevos centros escolares. La manifestación se produce en medio de las negociaciones del nuevo Acuerdo Sectorial.
"Llevamos meses trabajando en esta huelga, que se ha construido desde las asambleas de los centros, desde los pueblos y barrios. Es el momento de luchar por nuestros derechos. Los sindicatos de la mesa sectorial no han firmado nada de nada. Hay que presionar para que ni primaria ni infantil se queden fuera de un acuerdo que mejore nuestras condiciones y la atención al alumnado", ha declarado una de las representantes del sindicato Menos Lectivas en la última asamblea celebrada el pasado 20 de febrero.
Durante estos días están programados piquetes informativos desde primera hora de la mañana en distintos centros educativos, seguidos de desayunos colectivos y quedadas para hacer pancartas. A las 12.00 horas del martes habrá una concentración frente a la Asamblea de Madrid. El miércoles la movilización se trasladará a la plaza de Neptuno, Cibeles y Sol y el jueves el escenario se traslada a la sede el Gobierno regional en la Puerta del Sol.
La jornada de parones se ha convocado por la asamblea Menos Lectivas, con el apoyo de sindicatos como la Confederación General del Trabajo (CGT), el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Madrid (STEM) y Confederación Nacional del Trabajo (CNT) Educación Pública. Por su parte, los sindicatos mayoritarios han decidido no sumarse a la iniciativa. La manifestación coincide con la negociación del nuevo Acuerdo Sectorial que se está debatiendo entre las organizaciones con representación en la mesa sectorial como Comisiones Obreras (CC OO), el Sindicato independiente, al servicio del profesorado de la enseñanza pública (ANPE), CSIF y la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades.
Los convocantes de esta huelga reclaman la reducción de la jornada lectiva de las 20 horas a las 18 horas semanales en Secundaria, Formación Profesional (FP) y Régimen Especial. En Educación Infantil, Primaria y Educación Especial solicitan que se pase de las 25 horas actuales a las 23 horas, para lo que piden un incremento de los cupos docentes correspondientes. "La vuelta a las lectivas previas a los recortes es el primer paso para comenzar a revertir el proceso de desmantelamiento que estamos viviendo en esta Comunidad, las 18 y las 23 lectivas son irrenunciables", han expresado desde estas organizaciones.
Asimismo, reclaman "reducción real de las ratios de alumnado por aula sin supresión de grupos", la implementación de políticas que reduzcan la segregación escolar, así como la construcción y dotación efectiva de nuevos centros públicos, así como el mantenimiento y adecuación de las instalaciones más antiguas que consideran que se encuentran "abandonadas y sin presupuestos para reformas".
La Comunidad de Madrid propuso a la mesa sectorial planteaba regresar a las 18 horas lectivas en la ESO y FP de forma progresiva en los dos próximos años. Para Primaria e Infantil no se contemplaba ninguna modificación en el cómputo de la carga de trabajo semanal, pero se incluía la posibilidad de reducir una hora complementaria semanal. Además, se recoge la necesidad de ampliar la plantilla docente para hacer frente a la bajada de ratios programada en los próximos cursos y el compromiso de seguir negociando otros temas pendientes. Para la asamblea Menos Lectivas estos puntos son insuficientes.
Desde la Consejería se han establecido unos servicios mínimos para que los centros educativos puedan seguir prestando servicio. Así, la Comunidad garantiza la apertura de las aulas en toda la región y establece que en todos los colegios de Educación Infantil y Primaria deberá haber un maestro por cada 50 alumnos, según recoge la orden donde se establecen estos requisitos. Por su parte, en los institutos de Secundaria o donde se impartan ciclos formativos de grado básico será necesaria la presencia de un profesor más por cada 90 alumnos. Para los sitios donde se atienda a alumnos con necesidades especiales, además de lo establecido con carácter general, deberá haber un docente por cada 25 alumnos.
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