La Dirección General de la Policía Nacional ha asegurado este jueves a los sindicatos policiales que el traspaso de la inmigración a Cataluña no supondrá la pérdida de las competencias que ahora tiene este cuerpo en materia de extranjería y fronteras.

Según han indicado fuentes sindicales, responsables de la Dirección han llamado a los representantes de esas organizaciones para tranquilizarles, después de que este mismo jueves hayan mostrado su inquietud por el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y Junts para ceder las competencias en materia de inmigración a la Generalitat a través de una ley orgánica.

Una cesión que, de forma unánime, han considerado un despropósito porque, según ellos, supondría el desmantelamiento y la expulsión de la Policía Nacional de Cataluña.

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De acuerdo con las fuentes, en esas llamadas la Dirección ha recalcado que las competencias actuales de este cuerpo policial se quedarían "como están". No obstante, algunos representantes sindicales han mostrado su desconfianza y han dicho que siguen a la espera de conocer el texto de la futura ley.

Han recordado, además, que actualmente hay 3.000 agentes de la Policía Nacional en Cataluña, de los que un 25% realizan tareas de extranjería y fronteras.

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De traspasarse esas competencias, a la Policía Nacional solo le quedarían en esa comunidad autónoma las funciones de expedición del DNI y de seguridad estática en los edificios de la administración central, han añadido las fuentes.

Mientras, fuentes del Ministerio de la Presidencia han indicado que, en cualquier caso, no se trataría de un traspaso, sino de una delegación de competencias. Un matiz muy importante, han recalcado estas fuentes, porque supondría que las competencias seguirían residiendo en el Estado y solo habría delegación de ellas.