El precio de la vivienda se resiste a bajar en España, a diferencia de lo que ya ha empezado a ocurrir al norte de los Pirineos. Según los últimos datos de Eurostat publicados este miércoles, el coste de los pisos subió en el tercer trimestre de 2023 un 4,5% en el país ibérico con respecto al nivel de precios del año anterior, un alza que no solo es el más pronunciado entre los registros de las cuatro grandes economías europeas, sino que se aleja de las bajadas anotadas en Alemania y Francia.
El encarecimiento de la vivienda volvió a acelerarse en España durante el verano por segundo trimestre consecutivo, después que la desaceleración del mercado inmobiliario dejara a inicios de año un alza interanual del 3,5%, el más moderado en casi dos años. Aunque se queda lejos del incremento del 7,6% anotado un año antes, la subida del 4,5% registrada en el tercer trimestre recupera de nuevo vigor en los aumentos en el precio de la vivienda. Solo entre los meses de julio y septiembre, los inmuebles se encarecieron un 2,5% con respecto a los tres meses anteriores.
Las subidas de precios de España contrastan con la tendencia general del Viejo Continente hacia la moderación de precios. Según los datos de Eurostat, en el tercer trimestre de 2023, el coste de la vivienda se redujo un 2,1% en la eurozona y un 1% en el conjunto de la Unión Europea (UE), acumulando en ambos casos seis trimestres de desaceleración. De este modo, los incrementos en el precio de los pisos se han ido atenuando -rozaban el 10% en el primer trimestre de 2022- hasta dar lugar a las primeras bajadas anuales ya en el segundo trimestre de 2023 -de un 1,5% en la eurozona y un 0,9% en la UE-.
Ese abaratamiento de la vivienda ha llegado a dos de las grandes economías europeas. En concreto, los precios cayeron en Francia un 1,5% en tercer trimestre de 2023, el último para el que hay datos disponibles. Se trata de la primera bajada interanual, después de haber crecido todavía entre abril y junio un 0,7% con respecto al año anterior. Más pronunciado es el desplome del precio de la vivienda en Alemania, donde la caída llegó al 10,2% en los meses de verano del año pasado. El país dirigido por Olaf Scholz registró la primera merma en los precios de inmuebles a finales de 2022, una bajada del 3,6% que se ha profundizado paulatinamente.
En cambio, en las otras dos grandes economías de la UE no hay rastro de esas caídas. En Italia, los precios repuntaron un 1,8% entre los meses de julio y septiembre con respecto a los datos registrados un año antes. Como en el caso de España, esa subida supone una aceleración respecto al crecimiento del 0,6% anotado en el trimestre anterior. Sin embargo, el alza de precios de Italia es significativamente inferior al de España, que se afianza como la gran economía europea donde el precio de la vivienda crece a mayor ritmo, una posición que ocupa desde la segunda mitad de 2022.
En término trimestrales, la vivienda todavía se encareció en el tercer trimestre un 0,3% de media entre los socios de la moneda única con respecto a los tres meses anteriores y un 0,8% en el conjunto de los países comunitarios. Por países, los precios se mantuvieron estables en Italia, mientras que crecieron un 0,4% en Francia y bajaron un 1,4% en Alemania. En cómputo global, siete Estados miembros de la UE anotaron descensos y 18 incrementos, siendo Luxemburgo donde más cayeron los precios con respecto al trimestre anterior (6,3%) y Polonia donde más subieron (4,5%).
Subidas en los alquileres
Además, la subida del precio de la vivienda en España es llamativa porque la fórmula de la compra ha tenido tradicionalmente en los países mediterráneos más peso que en Centroeuropa. Según datos de Eurostat, el 76% de la población española vivía en 2022 en viviendas en propiedad, frente a un 24% que se decantaba por el alquiler, unos porcentajes similares a los de Italia (74,3% y 25,7% respectivamente). En cambio, en Francia y Alemania, la proporción de propietarios desciende hasta el 63,4% y el 46,7%, ganando peso los inquilinos.
No obstante, junto al precio de la vivienda, los alquileres también han crecido en España un 2,08% en el último año hasta noviembre, último mes para el que Eurostat ofrece datos armonizados. Sin embargo, este incremento es inferior al alza media registrada en el conjunto de la Unión Europea, que roza el 3%. De hecho, España es el quinto país europeo donde menos se han encarecido los alquileres, solo por delante de Alemania (2,06%), Países Bajos (2%), Luxemburgo (1,5%) y Estonia (-1,7%). También Francia e Italia se sitúa por debajo de la media europea, con alzas del 2,2 y 2,4% respectivamente.
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